Existen muchos conceptos erróneos sobre el trastorno bipolar . Muchos creen que esta condición, que se caracteriza por cambios extremos de humor, no es más que un rasgo de carácter; el signo de alguien volátil y temperamental que simplemente está de mal humor. De hecho, algunas películas y programas de televisión muestran este evento episódico como divertido y trepidante. Creativo, provocativo y atractivo. Y muchos suponen que el trastorno bipolar es el trastorno de una persona «loca». Tantas cuestiones alrededor de esto merece ser aclarado… Para ello, hemos preguntado al Dr. Xavier Fàbregas, fundador y director médico de Mas Ferriol y especialista en adicciones y salud mental, con más de 38 años de experiencia: «El trastorno bipola r como un trastorno del estado de ánimo que provoca que el paciente experimente momentos extremos de euforia (episodio maníaco) y de depresión ». Según su definición, son personas que tienen una temporada en sus vidas en las que el estado de ánimo está marcadamente mucho más subido de lo que sería habitual y otros episodios en el que el estado de ánimo está por debajo de lo esperable.Noticia Relacionada Psicología estandar No Bipolaridad: en qué consiste esta patología y cómo se trata En general, suele comenzar entre los 15 y los 25 años y se desconoce la causa concreta¿Cómo identificar si es trastorno bipolar o solo una mala época? Xavier Fàbregas indica que para que se trate de un trastorno bipolar tienen que aparecer al menos una vez en el curso de la enfermedad dos fases claramente diferenciadas de la normalidad: un episodio depresivo y otro de exaltación y de sensación de malestar, y el identificar estas fases, aclara, no es fácil: «Los pacientes en fase maníaca no suelen acudir en busca de tratamiento por que se sienten subjetivamente encantados en esa fase. Es solamente en la fase depresiva cuando los pacientes piden ayuda». Tal como dice el doctor, «es muy fácil confundirlo con una depresión al uso porque solamente aprecias los síntomas de esa persona que está baja de estado de ánimo con la sensación de que todo es una ruina, tristeza , falta de energía e incluso con pensamientos recurrentes de suicidio. No equivocarse en el diagnóstico es clave ya que el tratamiento y el pronóstico son diferentes».Quiénes sufren trastorno bipolarAl igual que sufrir de estrés, ansiedad o depresión, un trastorno de la bipolaridad puede sufrirlo cualquiera. Sin embargo, hay personas más propensas que otras como por ejemplo quienes en la historia clínica tienen antecedentes familiares de trastornos del estado de ánimo , aunque esto no es en absoluto determinante. Xavier Fàbregas señala que no parece haber desencadenantes personales que favorezcan la aparición de este trastorno, por lo que la prevención es muy difícil».Eso sí, el trastorno bipolar puede darse a cualquier edad aunque la edad de inicio de los primeros síntomas suele darse alrededor de los 20 años. «Es probable que episodios que se den en la adolescencia puedan ser confundidos dentro de la inestabilidad propia de esta etapa vital. Y en muchos casos el diagnostico se hace mucho más tarde, después de identificar episodios de estado de ánimo exaltado que no se conocían o se valoraban erróneamente», alerta el doctor.Noticia Relacionada estandar No Qué es el trastorno límite de la personalidad y por qué tal vez esté más cerca de lo que crees Tomás Navarro El psicólogo Tomás Navarro explica las claves de un trastorno de la personalidad que no siempre resulta fácil de identificar. Es una de las claves de su libro ‘Tus líneas rojas’, cuyas ideas comparte cada 15 días en ABC BienestarSe trata de un trastorno difícil de diagnosticar, llegando a tardar una media de 16 años en lograr un diagnóstico de bipolaridad porque muchas veces el paciente solo va a consulta cuando está deprimido y durante muchos años han sido tratados como depresivos. El experto afirma que los que más rápidamente se identifican serían aquellos que tienen una mayor carga genética y que debutarían con descompensaciones más graves: con síntomas psicóticos .Cómo se muestra una persona bipolarLa propia persona puede deducir en un momento dado si sufre este trastorno, pero quienes lo rodean también pueden prestar atención a los síntomas. Y se identifica por momentos extremos de euforia que contrastan con momentos de depresión. Para las personas del entorno es evidente que pasa algo porque se percibe una clara diferencia en los comportamientos en las fases de descompensación.«En las fases maníacas la persona siente una gran energía, tiene menos necesidad de descansar y es típico uno de los síntomas: el levantarse muy descansado a pesar de haber dormido muy pocas horas. Hay una gran locuacidad (hablar mucho) y se suelen cometer indiscreciones contando cosas íntimas incluso a personas desconocidas. Hay planes grandiosos, poco realistas, que no admiten que sean cuestionados por los demás. Se pueden hacer gastos excesivos o inversiones arriesgadas. Y puede existir un aumento del deseo sexual llegando a provocar situaciones incómodas», cuenta Fàbregas.En la otra cara, los episodios depresivos son bastante parecidos a los de un episodio de depresión mayor: tristeza, anhedonia (falta de satisfacción en la realización de actividades que antes resultaban placenteras) pensamiento de ruina, llanto fácil o indiferencia afectiva, insomnio o aumento de la somnolencia, falta o aumento del apetito, ansiedad…El trastorno bipolar puede ser clasificado en tres tipos: trastorno bipolar tipo 1, tipo 2 y trastorno bipolar mixto. La diferencia entre el 1 y el 2, tal como cuenta el médico, es que en este último la fase expansiva es de una intensidad menor, lo que llamamos una hipomanía, mientras que en el del tipo 1 la fase maníaca está muy exacerbada. «En el trastorno mixto se suceden las crisis, con una frecuencia mayor en las descompensaciones. Estas diferencias también contribuyen a dificultar el diagnóstico porque como los síntomas maníacos en la de tipo 2 son más leves, puede llevar a confundirlos con un momento de mejora, de buen estado del paciente», recalca. En cuanto al tercer tipo, el trastorno bipolar mixto, es poco frecuente y se caracteriza por una mezcla de los síntomas de la fase maníaca y de la depresiva al mismo tiempo. Es considerado como un agravamiento de cualquiera de los otros dos tipos, provocado por la falta de tratamiento del trastorno bipolar o por no seguirlo de forma correcta. Xavier Fàbregas comenta que también existe una forma más leve, la ciclotimia, en la que los síntomas se manifiestan mucho más atenuados y que quizás sea una forma de presentación de los primeros episodios que podrían evolucionar a episodios más marcados.Superar el trastorno bipolarUna vez identificado y entendido el trastorno, existe medicación para no solo contener, sino también prevenir las fases maníacas y depresivas. Para ello se utilizan distintos fármacos : si el paciente se encuentre en una fase maníaca debe tratarse con antipsicóticos. Si, por el contrario, está en fase depresiva, el especialista le administrará antidepresivos. Estos fármacos se tomarán sólo hasta que se consiga un equilibrio en el estado de ánimo del paciente.A partir de ahí, el experto indica lo esencial que es iniciar un tratamiento preventivo con eutimizantes, medicamentos que evitan que se dispare tanto la fase maníaca como la depresiva: «Serían los que mantienen el estado de ánimo en un rango de normalidad, con las oscilaciones propias de las reacciones a las situaciones vitales que se viven».
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