Si miráramos Badía del Vallés desde un helicóptero, nos encontraríamos con un mapa de España en miniatura. El trazado de sus calles reproduce fielmente la península Ibérica , porque también incluye Portugal. Así, en el punto del mapa en el que debería estar Oporto, está la calle Oporto. El este del pueblo es atravesado por la avenida del Mediterráneo y el norte por la del Cantábrico. Existen la calle de Burgos, el ‘carrer’ de la Bética y la vía de la Plata. Los colegios tienen el nombre de bailes regionales: la Jota, la Muñeira, las Seguidillas y, pese a que su extensión no alcanza el kilómetro cuadrado, se trata del municipio con más densidad de población de toda España. Y a lo que vamos: este es también el lugar con menor porcentaje de voto soberanista de Cataluña , un 18,34%. Es decir, más de ocho de cada diez votos aquí van para partidos no independentistas, la mayor parte de ellos para el PSC. Por poner un ejemplo, Vox saca en Badía cinco veces más votos que Junts.Noticia Relacionada reportaje Si Viaje al centro de la ‘terra’: el pueblo más independentista de Cataluña José F. Peláez En Sant Martí d’Albars el 98 por ciento de sus vecinos votó al independentismo en las últimas elecciones autonómicas; en las municipales, Junts se hizo con sus cinco concejalesQuizá uno de los motivos de este patrón de voto sea su pobreza -es el tercer municipio con menos renta per cápita de la comunidad – o quizá su juventud -pese a ser construido durante el franquismo no se segregó de Sardañola y Barberá hasta 1994-. En cualquier caso, se trata de un lugar extraño, de un enorme barrio residencial al estilo de los setenta, con sus bloques de diez plantas de ladrillo y amianto, su racionalismo extremo y esas zonas verdes que no nacen de la naturaleza o del sueño de un visionario sino de la licitación pública. Hay algo perturbador en tanta lógica y en una planificación casi soviética que, de tanto perseguir servir al humano, acaba por deshumanizarlo. Y al final parece que estás dentro de los Sims, con un centro cívico donde tiene que haber un centro cívico, un parque para mayores en el lugar que le corresponde en el manual al parque de mayores y avenidas rectas y anchas como los martes de un alemán. elecciones_correo_0679 Elecciones por correo ABC te ofrece la jornada de la campaña electoral catalana en 5 minutos NoLa lógica extrema -pienso- no es propia del ser humano, que comete errores, construye sobre ellos y salva como puede el devenir del tiempo. Las ciudades viejas no son tan racionales, contienen trazados mal hechos , curvas absurdas, empedrados desgastados y arrugas en el pasado. Pero no en Badía, que me recibe con una lluvia torrencial, carteles de Illa y de los comunes y un ambiente a medio camino entre un polígono industrial de Extremadura y el Birmingham de los 90.Entro en varios bares para observar y preguntar. En todos me encuentro lo mismo: locales pequeños -donde hay de todo menos entusiasmo- en manos de mujeres asiáticas que miran compulsivamente un iPad y hablan por teléfono en chino mientras atienden a una clientela de hombres que hablan poco, pero en castellano. Son bares de barrio, humildes , con deportes en la tele y tragaperras funcionando a pleno rendimiento, lo cual le da a la escena un aire decadente y un mensaje claro: perdida la esperanza, solo el azar nos sacará de aquí. Un vigilante de seguridad habla con un operario de limpieza cuando llega un jubilado y pide un tinto.Sospecho que el independentismo es un capricho reservado a los más ricosFuera del bar un chaval en chándal fuma tabaco de liar junto a un perro peligroso. En la parada del bus, hay varios inmigrantes de origen pakistaní que no hablan entre ellos ni tampoco conmigo. En el kiosco no aceptan tarjeta, por lo que me toca devolver lo que había pedido con el único objetivo de entablar conversación con la quiosquera y que me contara qué tal todo, qué pasa por aquí, por qué votan lo que votan.Pero no hace falta: lo veo con mis ojos. Es este uno de los lugares con más paro de Cataluña. A la salida del colegio, las mujeres con velo recogen a sus hijos. En las paredes de las casas de protección oficial los carteles semiarrancados y las pintadas reivindican una residencia para mayores y los parques están vacíos. Dentro de las casas dormita una población envejecida donde el 80% no tiene estudios secundarios . Vinieron en la ola de inmigración de los 60 y estos municipios fueron la salvación a los ambientes insalubres de las corralas de Barcelona a las que estaban destinados. Ahora se pasan la tarde viendo la tele. Sospecho que el independentismo es un capricho reservado a los más ricos y el orgullo identitario se disipa en cuanto llega el paro y el tedio. Y concluyo que el hecho de ser el pueblo menos independentista no te hace el más españolista. Porque lo peor de ser una tierra de nadie no es que tú no te sientas parte de nada. Sino que nada se sienta parte de ti.
![Viaje al pueblo catalán menos independentista: Badía del Vallés o la tierra de nadie Viaje al pueblo catalán menos independentista: Badía del Vallés o la tierra de nadie](https://ayuser.org/wp-content/uploads/2024/05/badia-del-valles-RrqGP7jp2b4KIsxCO6PJlAM-758x531@diario_abc-e577nT.webp)
Leave a Reply