Varones, entre 45 y 60 años, con familia y empleo estable y sin antecedentes. Este es el retrato de los cuatro individuos detenidos el lunes de la semana pasada por la Policía en Murcia por extorsionar a empresarios y que formaban el autodenominado Grupo de Acción Ciudadana (GAC) , «civil, armado e independiente» –así lo definían– e inspiración anarquista, según fuentes de la investigación, aunque no les gusta ser encasillados políticamente: «Ni fascistas, ni marxistas», proclaman, si bien se les ha intervenido el manual de los Grupos Anarquistas Coordinados , que en 2012 atentaron en la Basílica del Pilar de Zaragoza .¿Qué es el GAC? Tal y como consta en su carta de constitución, se trata de una organización que actúa «al margen de una justicia inactiva, inexistente y arrodillada a intereses partidistas o personales» («lo hacemos no reconociendo a ninguno de sus tribunales») y en la que ya se señala como objetivos a «directivos y socios de empresas satélites vinculadas al gobierno regional de Murcia» , «personas físicas que actúen en beneficio propio aprovechando los bienes o fondos que pertenecen al pueblo» y «todas aquellas personas que, aprovechando su condición de personas ligadas al gobierno regional o municipal, ya sea por cargos o por intermediación en operaciones de contratación con las instituciones, se lucren ostentosamente».Además de ese acta de constitución, la organización tiene otra pata, la Plataforma Ciudadana de Resistencia , con página web propia, legal y que utilizaban para difundir su pensamiento y captar fondos para pagar la lucha y más adeptos. En ese portal defendían «la eliminación de los partidos políticos nacionales» y «la intervención de las Administraciones públicas» y se detectó un vídeo del líder con pasamontañas y la voz distorsionada, con una puesta en escena similar a las de cualquier grupo terrorista.Noticia Relacionada estandar No Confirman la condena de dos años y medio de prisión para tres integrantes de una banda nazi por agredir a un joven en el Barrio Húmedo de León ABC Le propinaron patadas y puñetazos hasta en cuatro ocasiones en una misma noche y le dejaron «tirado y abandonado» cuando perdió el conocimientoLa Brigada de Información de Murcia , que ha trabajado en coordinación con la comisaría general, ya le tenía bajo el radar, pero en abril se constató el paso de las ideas radicales a la acción criminal. Ese mes un empresario de Murcia denunció ante la Policía que ese grupo le exigía 100.000 euros con la amenaza de tomar represalias contra él y su familia. El requerimiento de pago iba acompañado con fotografías de sus familiares en distintos lugares y fechas que abarcaban el periodo de un año, así como de un cartucho del calibre 9mm Parabellum. La Policía asesoró a las víctimas durante toda la investigación, marcando la estrategia de negociación desde el principio. En la madrugada del lunes de la semana pasada se puso en marcha un amplio dispositivo policial –necesario porque los sospechosos manejaban armas y explosivos– y se hicieron las detenciones y dos registros .En la vivienda de los sospechosos se encontraron dos armas de fuego : una pistola del calibre 9 milímetros legalizada –su propietario tiene licencia– y un subfisuil del calibre 22, americano, de procedencia ilegal que ahora se investiga. Además se halló munición y también se confiscaron dispositivos de seguimiento y localización tipo GPS , un distorsionador de voz, lazos de detención, gafas de visión nocturna, once teléfonos móviles y material informático .En la casa del líder, un chalé de una planta con un pequeño terreno, se localizó un taller de explosivos y dos artefactos ya preparados . Se trataba de dos bombas con capacidad para causar daños importantes, ya que no sólo contenían el explosivo, sino también metralla, gasolina y pastillas de iniciación de fuego: «El objetivo no era sólo causar el daño de la detonación, sino que luego también se produjera un incendio» , dicen las fuentes consultadas, que añaden que este sujeto experimentaba con artefactos en un campo próximo a su vivienda para tener todo controlado. En una mochila que contenía uno de ellos había hecho un orificio a fin de poder acceder al dispositivo mecánico de detonación retardada sin necesidad de abrirla.«Peligrosidad evidente»Con todo, aún se está en la primera fase de la investigación, ya que hay mucha documentación y dispositivos electrónicos que analizar . Se sabe que el grupo había seguido a otras dos familias de empresarios y hay que comprobar si fueron objeto de extorsión, o aún no se había llegado a ese punto. Y es posible que haya además víctimas que no han denunciado .«No estamos ante un grupo más o menos radicalizado, de gente simplemente desencantada con su opción política, o de jovencitos con ganas de aventura; se trata de cuatro adultos que habían pasado a la acción y su peligrosidad es evidente», sostienen las fuentes. El juez número 4 de Molina de Segura, que instruye las diligencias, ordenó el ingreso en prisión del cabecilla .
Leave a Reply