El día de la Paloma amanecía temprano. La patrona ‘oficiosa’ de Madrid vigilaba que, pese a la multitud, todo anduviese en su momento y en su lugar. Lo mismo el clavel de Regina que los faroles procesionales que se terminaban de adecuar. Tamizaban la bombilla eléctrica del paso. Antes de la misa en la iglesia de la Paloma iba corriendo un airecillo fresco. Quizá porque en esa zona donde se mezcla la rosa de los vientos, haya espacio para que el ‘todo Madrid’ desfile. La Paloma, ayer mismo, antes de la misa , iba congregando a fieles. Los menos, ataviados; los más a la sombra.En las cercanías de la iglesia de la Paloma todo era un entrecruce de gentes que veía, al fondo, el cuadro de la Paloma. El templo parecía Gran Vía en enero y en rebajas. Son pocos metros los que unen, salvando la geografía, la parroquia y la Casa de los Caracoles, en plena calle de Toledo, donde las guías castizas sin imprimir recomiendan guardar cola para digerir lo más castizo. Noticia Relacionada Se autoinvita a un acto de Almeida estandar Si La nueva «rabieta» del delegado del Gobierno en Madrid Carlos Hidalgo Francisco Martín Aguirre ha querido estar presente, sin que finalmente pudiera acudir, en la entrega de las Palomas de Bronce de los Bomberos del Ayuntamiento a la Jefatura Superior de PolicíaY la cola, la llevaban guardando desde que la misa entraba en su ecuador. Mismo momento, o aproximado, en que fuera, junto a la carroza de la Virgen, los anderos daban los últimos retoques a un paso procesional que este año, con el amor de congregantes y cofrades, iba de estreno. Ricardo García, uno de sus anderos, hablaba de la nueva carroza, «del pan de oro», de que el «arco se ha dividido en dos partes», y de otras mejoras para la movilidad. Juan Miguel Gil era el bombero del Cuerpo del Ayuntamiento de Madrid encargado de bajar a la Virgen, y sus compañeros no querían soltar prenda de él. O sí. Que es un «enamorado de la Paloma» y «buen compañero».madrid_dia_0703Antes, y durante, en las únicas cafeterías abiertas, el público desayunaba fuerte. Como en los ‘sanfermines’. Salvador, en este ‘dramatis personae’ del día más castizo, llevaba en el bolsillo de la camisa una rama de romero. Una ofrenda olorosa a la Virgen. Y, paralelamente a la fe, brujuleaban los trabajadores habituales y los ocasionales. Loteros como Luis, que vendía el cupón acabado en 70 y deseando una suerte beatífica. O Victorino Enciso, que se jubilaba como capataz de la carroza y recibía una placa: «Después de cuarenta años ya tocaba». Concretamente eran 44 años, y Victorino, aún, seguirá de segundo capataz, alegre por el remozado de la carroza procesional. Una placa conmemorativa se llevó Enciso rodeado de abrazos. Entre la misa y el desayuno, el aparataje del barquillo de los «Hermanos Caña, los mejores de España», en la calle de la Paloma, buscaba sol. El sol, y hay que volver a ello, refulgía en la carroza de la Virgen. Cada cual quería su gloria, Agustín, ex de Infantería según él, saludaba a Ortega Smith con un traje planchado que iba desmintiendo jubilaciones morales. Antes de la una se presentaron Almeida y Ayuso; el primer edil, jugando con el refranero, se refirió al día de la Paloma como un jueves «que brilla más que un sol». Un poco atrás llegaba la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, en una contrarreloj de pueblo y de selfis. En la misa, poco a poco, se iba relajando el espacio, que, en momentos, fue asfixiante. Un ‘sereno’ ataviado para la ocasión con un ‘chuzo’, un palo acabado en pica, que era lo típico entonces, golpeaba el suelo reclamándose. Iba poniendo acento asturiano o gallego por ser fiel a la historia y para que su traje y su tipo sean valorados en el concurso en un futuro. MÁS INFORMACIÓN noticia Si Imagineros del siglo XXI: en España aún se hacen santos noticia No Fiestas de San Cayetano, San Lorenzo y La Paloma en Madrid: conciertos, horarios y programa completo de actividadesJosé Prades, de México, vigilaba a los nietos de su hija Cynthia, sorprendido de que, en la medida de sus circunstancias, la fe a la Paloma fuera como a la Virgen de Guadalupe. Empezó la misa, y a escasos metros de la pantalla donde se transmitían los oficios, había una multitud de tumbonas. Unos niños jugaban con aviones de papel. Silencio en el descendimiento y aplausos cuando el cuadro de la Paloma tocó suelo.
![La Latina, en busca del selfi político y de la nueva carroza de la Virgen de la Paloma La Latina, en busca del selfi político y de la nueva carroza de la Virgen de la Paloma](https://ayuser.org/wp-content/uploads/2024/08/praprativos-Rd3aSMHK79dbnCZa5TfutPO-758x531@diario_abc-yzXotF.webp)
Leave a Reply