La persona que ha ejercido de secretaria del comisionista del caso Koldo Víctor de Aldama, Piedad Losada, durante la última década, ha comparecido como investigada este martes ante el juez y, a preguntas exclusivamente de su abogado, ha asegurado que «no» conocía de la existencia de comisiones en efectivo y se ha desmarcado de los negocios por los que su jefe está imputado: «Yo hacía lo que me pedían los socios». Según informan en fuentes jurídicas presentes en la declaración, Losada, visiblemente nerviosa, ha explicado que trabaja para Aldama desde el año 2013, cuando se asoció con el que era su jefe y después se rompió la relación, quedándose este con la oficina, por la que han ido pasando «distintos socios» -los últimos se incorporaron en 2020- y varias sociedades. La última que la tenía en nómina dejó de pagarle el sueldo el pasado mes de enero y tiene interpuesta una reclamación mientras se encuentra de baja por incapacidad temporal. Ha afirmado que no controlaba la agenda de Aldama ni tampoco sus reuniones, más allá de que pudiera tener conocimiento de algún encuentro «puntual» vinculado a la oficina. Noticia Relacionada estandar No El PSOE pide personarse como acusación en las dos causas en las que está investigado Aldama Iuri Pereira El partido solicita su personación dado el «interés nacional» de ambos casos y los «graves hechos investigados»En cuanto a su día a día, ha explicado que se encargaba de todo, eran «muchos socios y muchas empresas» y las labores administrativas las realizaban entre dos. Se ocupaban de gestión de documentación, mantenimiento, trámites burocráticos y en ese contexto, ella era «el enlace» con distintos asesores, contables o financieros, de acuerdo a su declaración, que le planteaban preguntas o necesidades que ella gestionaba. Cobraba por transferencia bancaria, nunca se le pagaban extras en efectivo e iba recibiendo las cantidades que se necesitaban, cuando se necesitaban, para trámites o gastos concretos, como la plaza de garaje, pero ni manejó fondos ajenos con tarjeta ni tuvo poderes sobre las cuentas o titularizó sociedades, conforme ha señalado. Tapia no declara, Serrano se desmarcaEn este sentido, su letrado le ha pedido explicaciones por una conversación que consta en el sumario con Aldama acerca de un alquiler con opción de compra y ha explicado que hizo gestiones porque su jefe tenía intención de arrendar una oficina en Portugal porque según decía, iba a trabajar con una empresa de ese país. De hecho, en 2023 registró una mercantil portuguesa en España a instancias de su jefe. La declaración de Losada completaba una ronda de comparecencias señalada por el juez Ismael Moreno para escuchar a los socios de Víctor de Aldama. Si el lunes acudieron César Moreno y Alberto Escolano, que se desmarcaron de los contratos sanitarios objeto de investigación, este martes era el turno de Ignacio Díaz Tapia, que tuvo comunicación directa con Ángel Víctor Torres cuando era presidente de Canarias por un negocio de test PCR y que se ha acogido a su derecho a no declarar. También comparecía Javier Serrano, que igualmente sólo a preguntas de su defensa ha negado que Aldama recogiese dinero para repartirlo a los demás y que tuviese vinculación alguna personal con los contratos sanitarios.
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