El juez del Tribunal Supremo Ángel Hurtado ha autorizado el volcado de la conversación que la mañana del día 14 de marzo mantuvieron el secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato , y la mano derecha de Óscar López , Pilar Sánchez Acera. El magistrado lo ha acordado así tras escuchar al diputado socialista tras la exclusiva revelada por ABC y con el acuerdo del testigo. Según ha podido saber ABC de fuentes jurídicas, el acta notarial que Juan Lobato firmó el pasado 6 de noviembre confirma todos los extremos de la exclusiva de este diario . El dimitido líder de los socialistas madrileños ha aportado los mensajes de WhatsApp que le envió el 14 de marzo Pilar Sánchez Acera, entonces jefa de Gabinete de Óscar López, mano derecha de Pedro Sánchez en La Moncloa. A las 08:29 de la mañana Sánchez Acera envió a Lobato el correo electrónico con la confesión del novio de Isabel Díaz Ayuso, es decir, más de media hora antes de que se publicara en elplural.com. « Cuidado con los datos personales », le dice, pues es el documento sin marca de agua ni edición para tapar móviles y otros datos.«Se puede sacar. Sácaselo en la pregunta . Un quién miente señora Ayuso, usted o su novio. Parece que usted. La imagen de la carta es potente», piden desde Moncloa al líder socialista madrileño . Noticias relacionadas estandar Si Sánchez llega a su congreso con 15 personas de su entorno bajo sospecha Inés Ruiz-Jiménez estandar Si Ferraz busca minimizar el conflicto para escenificar una falsa unidad Juan Fernández-MirandaLobato sospecha y pregunta « ¿pero se ha publicado en algún sitio? ». Lo cierto era que no, y por eso Sánchez Acera le dice «porque llega, lo tienen los medios». La verdad es que los medios solo habían publicado entrecomillados, no el documento. Ante la desconfianza de Lobato , la mano derecha de Óscar López le dice «vamos a verlo, para que estés más respaldado». «La necesito diciendo de dónde la saco, porque si no parece que me la ha dado la Fiscalía». Entonces Sánchez Acera le pregunta a qué hora estará frente a Ayuso. A las 11, le dice él. «Va a salir antes, para el control. A las 11 ya habrá salido todo el mundo con ella». Acera se encarga de filtrarla. A las 09:29 le envía la publicación de elplural y le dice «ya está» .Según fuentes jurídicas presentes en la declaración, Lobato ha dicho que el breve comunicado con el que salió al paso una vez que ABC publicó la exclusiva a última hora de la tarde del domingo fue consensuado con Sánchez Acera y con el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán. En él venía a matizar lo que apenas unas horas antes había confirmado a ABC dejando claro que «toda la información vino de medios de comunicación».Carpeta del PSOE en manoLobato llegaba a su cita al Supremo quince minutos antes de las diez de la mañana. Lo hacía solo, con un traje gris, sin otra prenda de abrigo, y una carpetilla blanca en la mano con el logo del partido. Lobato no ha hecho declaraciones a la prensa y ha subido directamente a la planta donde le esperaba el instructor Ángel Hurtado y los letrados de las acusaciones particular (la del novio de Ayuso) y de las populares (APIF, Manos Limpias, Colegio de la Abogacía de Madrid y Foro Libertad y Alternativa). Con el acta notarial que le ha reclamado el juez, Lobato ha tenido que responder sobre las circunstancias en las que se produjo la supuesta filtración del correo electrónico en el que la defensa de González Amador reconocía ante el fiscal de delitos económicos Julián Salto que su cliente había cometido dos delitos fiscales. Según publicó ABC en exclusiva, el socialista dejó constancia en la notaría de que el correo en cuestión se lo había enviado el 14 de marzo por la mañana Pilar Sánchez Acero, mano derecha del entonces jefe de Gabinete de Sánchez (y hoy ministro) Óscar López. En ese momento ningún medio había publicado todavía ese correo, algo que Sánchez Acero avanzó a Lobato que haría El Plural una hora después, como efectivamente sucedió. La difusión de ese correo, de carácter reservado por cuanto se produjo en el marco de un procedimiento de conformidad y afecta al derecho de defensa de González Amador, puede derivarse en responsabilidades penales. Eso al margen de que el origen de la filtración puede establecer una conexión directa entre la Fiscalía (García Ortiz y la jefa de la Provincial de Madrid Pilar Rodríguez ya están imputados en la causa) y Moncloa. (Noticia en ampliación)
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