Podemos salvó el 21 de noviembre el paquete fiscal con un acuerdo de última hora con el PSOE a cambio de una comisión negociadora con todos los socios de investidura para hacer permanente el impuesto a las grandes empresas energéticas a través de una proposición de ley. El tributo decae el próximo 1 de enero. En caso de no lograr sacar adelante la norma antes de fin de año, el Ejecutivó pactó con ERC, Bildu y BNG la prórroga de un año del gravámen mediante decreto ley. Tras veinte días, no hay avance alguno. Más bien todo lo contrario. Los socialistas se resisten a pactar el gravámen energéticos con Podemos, que urge al Ejecutivo de Pedro Sánchez a cumplir con su palabra. Ha sido necesario el enésimo órdago de los morados, que ahora dan por «rota» su confianza en el PSOE y vuelve a amenazar los presupuestos generales del próximo año, para que Ferraz convoque la mesa de partidos. El Ministerio de Hacienda ha convocado hoy, a las 16.00 horas en el Congreso de los Diputados, a todos los grupos que apoyaron el paquete fiscal el mes pasado, incluidos aquellos entre los que el tributo energético ya ha generaado recelos (PNV) e incluso rechazo (Junts). Por parte del ala socialista del Gobierno está previsto que acuda a la cita el secretario de Estado de Hacienda, trasladan fuentes del ministerio, y por parte de Sumar, el secretario general, Txema Guijarro, y el portavoz económico en la Cámara Baja, Carlos Martín Urriza.Dos nombres que los de Yolanda Díaz no confirmaron hasta última hora de la tarde tras ser preguntados insistentemente por ello. La figura de Podemos está por decidir todavía.Noticia Relacionada 5.000 millones de ingresos en 2025 estandar Si El Gobierno saca adelante el impuesto a la banca y las subidas a fumadores y ahorradores, pero no al diésel Bruno Pérez Logra un acuerdo ‘in extremis’ con Podemos bajo la promesa de tramitar más adelante un impuesto a las energéticas de futuro inciertoLa de esta tarde es, a juicio de Podemos, de una cita que debería haberse agendado «mucho antes» para dar mayor margen de negociación a las fuerzas políticas. Los de Belarra, con la mosca detrás de la oreja, se malician ahora más que nunca y después de que el PSOE lleve semanas dándoles largas, que Hacienda faltará a su palabra. «En las conversaciones que estamos manteniendo, parece que se da por descartada la aprobación del impuesto a las energéticas», denunció este martes Javier Sánchez Serna en una rueda de prensa del partido en el Congreso anterior a la Junta de Portavoces. El diputado, que ve una clara «falta de voluntad política» por parte del PSOE en toda esta negociación, aprovechó para lanzarles un aviso: «Que no nos busquen luego para los presupuestos generales». Las cuentas estatales son la última baza que le queda a Podemos en este sentido, ya que resulta imposible que puedan tumbar la reforma fiscal a su vuelta al Congreso, donde únicamente se votarán ya las enmiendas del Senado. Aun así, dicen, reconstruir la confianza de Podemos -que aún no tiene claro el sentido de su voto en caso de que la proposición no de ley de los de Carles Puigdemont para una cuestión de confianza a Pedro Sánchez llegue a pleno finalmente- es «sencillo». Basta con que el Gobierno «convenza a la derecha catalana y vasca» para reestablecer dicho impuesto. Pero, añadió Sánchez Serna, «nos dicen que lo ven lejano, que es más fácil descartarloy esperar. También que hay quien no quiere que Podemos se apunta una victoria». En cualquier caso, deja claro la formación que no va a adentrarse en «la dinámica de prometer cosas para que se les vote [al PSOE] la reforma de los reales decretos y que luego no se cumplan». Una lógica socialista que tachan de «perniciosa para todos». Los socialistas admiten que no es fácil llegar a un acuerdo que contente a todos, pero aseguran que ellos «siempre» cumplenEn el partido morado reina una mezcla de escepticismo y enfado a partes iguales. Voces cercanas a la cúpula denuncian que no haya ni siquiera una propuesta de negociación encima de la mesa de esta tarde, que será tan sólo una primera toma de contacto. «No puede ser que los únicos pactos que no se cumplen sean con Podemos. El acuerdo era sentarnos todos y que el Gobierno hiciera su parte, que era convencerles», afean al Ejecutivo.La incógnita de PNV y Junts«No saquemos conclusiones que no llegan a ninguna parte», pidió el portavoz socialista en el Congreso, Patxi López. Pese a escudarse en que él no es Gobierno, a imagen y semejanza del ministro Ernest Urtasun el día anterior para no pronunciarse sobre la ausencia de España en Notre Dame durante una rueda de prensa que ofreció como portavoz de Movimiento Sumar, aseguró que La Moncloa quiere que haya acuerdo porque su voluntad es siempre la de cumplir con sus compromisos. «Siempre lo ha hecho», apostilló. En este sentido, fuentes parlamentarias socialistas reconocieron que buscar una fórmula que agrade a todos los socios «no es fácil» porque «unos quieren [el impuesto] y otros no».Ya de entrada, la vicepresidenta primera y ministra del ramo, María Jesús Montero, no va a lograr sentar a todos los socios en esa mesa de esta tarde, tal y como ha prometido a Podemos. El PNV, por ejemplo, confirmó a última hora de este martes que no acudirá a la cita, Y los neoconvergentes, por su parte, optaron por el silencio dejando así en el aire también su asistencia.
Leave a Reply