Disney Channel marcó una era en los años 2000 en España. Los niños y adolescentes de entonces crecieron al ritmo de ‘The Best of Both Worlds’ de Hannah Montana, fueron testigos como nadie del fenómeno de los Jonas Brothers en ‘Camp Rock’, vivieron muchas aventuras con Zack y Cody en ‘Hotel Dulce Hotel’ y los más pequeños rieron con ‘Brandy y Mr. Whiskers’ y ‘Buena Suerte Charlie’. Sin embargo, pocos son los niños que ahora acceden al canal en abierto para ver los contenidos del grupo. Su parrilla también se ha visto modificada con el paso de los años y ahora apenas se puede ver una serie que no sea de animación. El próximo 7 de enero, después de 20 años de entretenimiento, música y muchas series, la cadena dejará de emitir sus contenidos y desaparecerá del TDT. «Haberos acompañado mientras crecíais ha sido un honor. Desde los Wildcats hasta los mejunjes de ‘Art Attack’, os llevaremos siempre en el corazón», explicaba Disney en un comunicado. Noticia Relacionada estandar No La subida de precio del servicio de Disney+ alcanza unos beneficios desorbitados EP Tras recaudar 2.400 millones de euros, el nuevo incremento de la plataforma se aplicará primero en Estados Unidos el 17 de octubre de 2024Los tiempos han cambiado y la forma de consumir los contenidos, también. Aunque en este caso el principal motivo es uno: Disney+. La irrupción de la plataforma de su mismo grupo en los hogares ha hecho que los niños y adolescentes cambien el canal de televisión por entrar en su perfil para ver los mejores contenidos a la carta. Desde que los niños cuentan con las plataformas en los hogares la audiencia del canal cayó provocando que la cadena pasara de un 1,2% de media en 2019 a un 0,9% el pasado año. Esta irrupción y su consecuente bajada en audiencia provocó que el liderazgo saltara a Boing y Clan, que desde 2021, son las cadenas más vistas por los niños. El hecho de no contar con una plataforma propia infantil provoca que la cadena tenga que seguir reinventándose en un tiempo complejo para los niños y la televisión en abierto. «Los niños son un público muy exigente. Son los que antes aceptan y consumen las nuevas tendencias y hay que estar muy a la vanguardia para que años tras año sigan eligiendo los contenidos», indica Sergio Sans, director de Canales Temáticos de Mediaset España. El cierre de Disney Channel es un acontecimiento emblemático porque no solo se trata de un adiós a la televisión que marcó a toda una generación, se trata también de un cambio social en el paradigma de los niños. «La desaparición de Disney Channel pone en evidencia que queremos ver el contenido a demanda y la tendencia es hacia una experiencia mas personalizada y basada en nuestros gustos», reconoce Emily Lawrenson, gerente de comunicación de Qustodio, una herramienta de control parental multiplataforma. No es difícil encontrar a niños que únicamente conocen aquellas series o contenidos que les gustan y apenas conocen aquellos que no les interesan, que manejan a la perfección el uso de las plataformas, pero que desconoce los canales que existen en la televisión en abierto. Qustodio reconoce que el uso de las plataformas suponen un avance para las familias. «Los padres pueden seleccionar el contenido más adecuado, hay controles parentales y pueden quitar anuncios. Las plataformas cuentan con un funcionamiento mas adaptado a la familia en sí», reconoce Lawrenson. Ahora, el balón está en Clan y Boing. En el caso de la cadena de Mediaset, Boing se ha mantenido (solo bajó un 0,1%) desde que consiguió el liderazgo de la cadena. Una de las estrategias que asumió la cadena es la de hacer contenidos que puedan reunir a toda la familia como ‘La casa de los retos’. «En Boing asumimos que la tendencia siempre será que poco a poco dejen de ver este tipo de contenido y vayan hacia uno más adulto, aunque hay jóvenes y adultos que ven Boing porque lo hacen en familia», asegura Sans. La programación de Boing es igual de variada que la de Clan, que dependiendo de la franja horaria emite ‘Pepa Pig’ o ‘Los Misterios de Laura’. A pesar de que Clan sí que cuenta con una plataforma como es RTVE Play donde todos los contenidos están a la carta, su audiencia es la misma que la de Boing y cuenta con el mismo objetivo que la competencia: atraer a niños y mantener a aquellos adultos que se acercan con sus hijos. Desde Qustodio reconocen que las plataformas también facilitan a las familias el acceso a un contenido seguro para sus hijos y es más cómodo consumirlo desde ahí que desde la televisión en abierto. «A veces los programas de la televisión tradicional no son para todas las etapas de la infancia y en las plataformas un padre o madre puede hacer selección», asegura Lawrenson. Aunque los retos son distintos porque, como asegura Lawrenson, la atención de los niños es más dispersa y los anuncios pueden impedir la concentración en un formato y «hacerse más pesado», desde Mediaset reconocen que los retos no han cambiado mucho: «Nuestro reto no ha variado. El objetivo es dar a los niños un contenido de calidad con el que se diviertan y entretengan». Sin embargo, Sans reconoce en la salida de Disney Channel una «gran responsabilidad» que tiene que asumir su grupo. «Este año ofreceremos nuevos contenidos que sean capaces de mantener al público fiel que nos ha hecho líderes estos años y conseguir atraer a otro público que se queda sin un referente como era Disney Channel».
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