Los teléfonos de los expertos en homologación de vehículos no dejan de sonar con dudas razonables (y propuestas rocambolescas) sobre la conversión de los coches viejos, de más de 30 años , en históricos, lo que les permite sortear las restricciones que sí tienen los turismos sin etiqueta para circular por zonas de bajas emisiones (ZBE) como, por ejemplo, la de la capital: «Tengo un R5 con casi 50 años, ¿podría hacerlo histórico y entrar con él a Madrid? Y otra duda, si solo puedo usarlo de forma ocasional, ¿podría comprarme un segundo coche viejo que he visto y alternarlos?». Un planteamiento similar así era impensable hace un año. Pero el nuevo reglamento de históricos aprobado en octubre por la Dirección General de Tráfico (DGT) simplifica y abarata este cambio de servicio. Una nueva norma que, unida a la implantación de zonas de bajas emisiones en todas las ciudades de más de 50.000 habitantes (desde el 1 de enero más de una veintena en la región, incluyendo la capital), deja la puerta abierta a que muchos propietarios de viejos turismos y ciclomotores se replanteen hacer este cambio, e incluso salvar sus antiguallas del desguace. «Hay mucha gente que vive en Madrid y si no hace su antiguo coche histórico s e queda sin poder usarlo, así que se han visto en la obligación», reconoce Antonio Alcocer, director de Approvalab, uno de los laboratorios oficiales de catalogación de la región. Si antes de octubre había que invertir unos mil euros y hasta tres meses para convertir un vehículo antiguo en un clásico, ahora, si la ITV está en vigor, puede resolverse en media mañana por 20,81 euros (grupo A). O rozar los cien si tiene que someterse al proceso más complejo (grupo B). Eso sí, siempre y cuando se cumplan varios requisitos: haber sido fabricado o matriculado por primera vez hace al menos 30 años (es decir, anterior a 1994), haber dejado de producirse, estar en su estado original o con reformas permitidas y tener un correcto estado de mantenimiento y conservación. Además, para evitar que estos cambios se conviertan en una forma de sortear las restricciones de las ZBE, la DGT marca que el uso de estos vehículos debe ser «ocasional», es decir, no pueden circular más de 96 días al año. Noticia Relacionada estandar No Más radares y controles: así nos vigilará la DGT esta Navidad N.S. El dispositivo de vigilancia, regulación y seguridad en carretera comenzará a las 15:00 horas del viernes 20 de diciembre y se prolongará hasta la medianoche del lunes 6 de eneroSegún datos de la DGT, en España el parque móvil tiene casi 38 millones de vehículos, de los cuales 50.000 son históricos, un número relativamente insignificante si se compara con los 400.000 de Francia, los 600.000 de Alemania o el millón y medio del Reino Unido. En menos de tres meses, explica a ABC Raúl Aranda, presidente de la Federación Española de Vehículos Antiguos (FEVA), han superado ya las 22.000 solicitudes, «la mitad de lo que llevábamos en 29 años con el anterior reglamento; aunque también es cierto que mucha gente estaba esperando porque sabía que iba a ser más sencillo y más barato». Las previsiones de la DGT hablan de superar los 120.000. Según un estudio de la organización realizado en 2023, sólo el 22,53% de los vehículos antiguos están catalogados como históricos, la inmensa mayoría anteriores a 1975. «La anterior ley era muy excluyente. Esta es homologable al resto de normas europeas», añade Aranda. El «engorro» de las ZBEEn Madrid, según un análisis propio a partir de los microdatos de la DGT de julio de 2024, hay 4.100.548 vehículos y 5.441 clásicos, el 0,13% del parque, una proporción casi idéntica que en el conjunto de España (0,12%). Sin embargo, hay 320.223 turismos matriculados en 1994 o antes, lo que supone el 7,8% del parque regional. Estos serían los susceptibles de pasar a histórico siempre y cuando estén en buen estado y solo tengan las reformas permitidas. Son casi la mitad (43%) de los que actualmente no tienen distintivo, 745.592 coches en toda la provincia, que sí tienen vetado el paso a las zonas de bajas emisiones según las ordenanzas municipales de cada localidad. En Madrid, por ejemplo, se aprobó una moratoria que permite circular y aparcar a los coches de residentes un año más. No obstante, precisa Aranda, muchos de estos autos antiguos sin etiqueta no están en circulación o en el estado adecuado para ser históricos, por lo que la cifra total de ‘conversos’ acabará siendo mucho menor.Por lo pronto, Miguel, residente en Alcalá de Henares, ya es uno de esos 22.000 propietarios que han hecho su vehículo oficialmente histórico. Su Seat 600, de los años 70, tenía algunos cambios hechos (el motor, los frenos de disco…) por lo que antes de acudir a Tráfico tuvo que acreditar que esos cambios estaban permitidos. Pero a partir de ahí, relata, los trámites fueron muy sencillos. Y baratos: «Antes me pedían hasta 1.200 euros. Era prohibitivo, para mí y para mucha gente. Ahora cuesta 20 euros, así que hace mes y medio hice los siete coches que tengo, entre ellos un Mini, un R8, un 2CV, un Autobianchi… históricos. ¿Su motivación? «Suelo salir a muchas concentraciones a grandes ciudades como Sevilla y Barcelona, por ejemplo, en las que hay restricciones para los coches sin etiqueta por las zonas de bajas emisiones. Así, por quitarme ese engorro, y como la ley nos protegía, di el paso». Como él, según datos de la FEVA, el 69% de los propietarios de históricos circuló por ciudades de más de 50.000 habitantes.Las motocicletas y ciclomotores también pueden mutar en clásicos. De hecho, destaca Alcocer, han experimentado un auténtico ‘boom’ de clientes que buscan cambiar el servicio de su vehículo de dos ruedas. En ciudades como Madrid, las restricciones las alcanzarán, tras la moratoria, en 2026. El parque total madrileño cuenta con 541.746 motos , de las cuales 1.350 son históricas (0,25% del total, casi el doble de la proporción de turismos). Por año de matriculación, 80.059 (14,8% de todas las que hay en la Comunidad de Madrid) cuentan con una placa anterior a 1994. Son más de la mitad de las que hay ahora sin distintivo (153.106, el 28,3% del parque regional). «Las marcas españolas, como Montesa, son además las que más se guardan y las que más han sobrevivido», asegura Aranda.En la Gestoría Ilustración también han experimentado estos meses un incremento de clientes que quieren pasarse al histórico. El acceso a las zonas de bajas emisiones, recuerda Sergio Ruiz, uno de los socios del negocio, no es la única ventaja con la que cuentan: «Además tienen bonificados los Impuestos a Vehículos de Tracción Mecánica, pasan la ITV cada más tiempo e incluso tienen pólizas de seguro especiales ». Todo ello, explica, bajo la filosofía de que el uso de estos vehículos es ocasional. Sobre el papel, al menos hasta ahora, era así. La última encuesta de la FEVA asegura que el 89% de los conductores los usa los fines de semana, sobre todo para salidas de recreo personal y eventos de exhibición. Controlar el uso ocasionalDesde la FEVA no creen que esta nueva norma vaya a provocar un uso más habitual de estos clásicos. Ni siquiera en las zonas de bajas emisiones, aunque el propio reglamento insta a los municipios a facilitar la circulación de los históricos, en las condiciones que se prevean en sus ordenanzas, por estas zonas vetadas a aquellos vehículos sin distintivo ambiental . «El límite de los 96 días está para eso, para fijar un uso ocasional. El fin de la norma es proteger el patrimonio, si se usa para que entren en ZBE coches viejos se desvirtúa», plantea Aranda, que insiste en la importancia de acreditar ante la DGT, que solo pide la ITV, el permiso de circulación y cuatro fotos, el buen estado del vehículo. « No creo que sea un coladero para coches sin etiqueta . Habrá quien cambiará su vehículo a histórico con ese objetivo, pero estos coches no son para uso frecuente: la mayoría son gasolina y gastan mucho en el día a día, cuesta acceder a los recambios, se averían…».Mucho más escépticos son los profesionales que trabajan a pie de taller. «El nuevo reglamento fija un límite para circular de 96 días y pide a los conductores una declaración responsable comprometiéndose a hacer un uso ocasional del mismo, pero ¿se va a controlar eso?», se plantea Ruiz. «¿Y cómo se va a hacer? Quizás en Madrid haya cámaras, pero desde luego no en todos los lugares existen. Y por otro lado esto es un agravio comparativo para aquellos que convirtieron antes su vehículo en histórico y ahora ven que tienen que someterse también a las limitaciones de una norma que busca reducir la edad de nuestro parque», apunta el experto de Approvalab. Este diario ha trasladado esta pregunta a la DGT, que al cierre de esta edición aún no había obtenido respuesta por parte de sus técnicos. Habrá que esperar para ver cómo evolucionan estos nuevos históricos.
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