El sindicato profesional de Policías Municipales de España se ha pronunciado ante las críticas recibidas por la muerte del mantero senegalés el pasado domingo, tras arrojarse al río para no ser interceptado por la policía. En el comunicado emitido hacen hincapié en la diferencia entre la venta ambulante y las falsificaciones, así como su deber en «perseguir los delitos».Los policías exponen que la venta de productos falsificados , como en el caso del mantero fallecido, «es una actividad ilícita tipificada en el Código Penal en los artículos 273 y 274, no tiene nada que ver con la venta ambulante, y en ningún caso se puede regular o habilitar, ya que se trata de un delito. Además conlleva una condena penal impuesta por la Administración de Justicia ». Prosiguen apuntando que la venta ambulante por su parte, es una actividad regulada en ordenanzas con la posibilidad de realizarse legalmente. Por tanto, el sindicato de policías declara que «no se puede igualar» y que «tampoco se debe criminalizar actuaciones policiales que están encaminadas a evitar, perseguir o investigar hechos delictivos«.Al final del escrito, apuntan que la Policía Local de Sevilla sufre «difamaciones intencionadas» cuando se les acusa de racismo , ya que nunca se ha dado una condena por dicha conducta. Añaden lo preocupante que resulta que ese tipo de acusaciones vengan por parte de dirigentes políticos que desconocen el funcionamiento de la ciudad, simplemente por alentar el descontento ciudadano para su beneficio propio. «Lo preocupante no es que lo hagan personas amigas o familiares de un fallecido, lo importante y preocupante es que lo hagan dirigentes políticos que ni saben cómo se actúa en la ciudad de Sevilla (igual no saben ni donde está) con el único n de alentar una comunidad ciudadana para su rédito político».
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