La Comisión del Estatuto de los Diputados ha dejado este martes al exministro José Luis Ábalos al borde de su imputación formal. El Tribunal Supremo emitió un suplicatorio al Congreso para poder investigarlo por tráfico de influencias, malversación y cohecho en el marco del caso Koldo, que trata de esclarecer el presunto cobro de comisiones ilegales durante la pandemia del Covid-19 en la contratación de mascarillas en la administración pública, y el citado órgano ha rechazado por unanimidad las alegaciones presentadas la víspera por el diputado y ha dado su visto bueno al procedimiento requerido.El presidente de la Comisión del Estatuto de los Diputados, Manuel Cobo (PP), ha explicado brevemente que todos los grupos parlamentarios, presentes en la cita, se han mostrado favorables de que se permita que el Supremo investigue a Ábalos, otrora hombre fuerte del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez , tanto en el Gobierno como en el PSOE. La reunión ha comenzado a las 12:30 del mediodía, veinticuatro horas después de que Ábalos entregase las alegaciones contra su suplicatorio, y casi una hora después de su inicio sus señorías salían de la sala Lázaro Dou con la decisión tomada y, esta vez, sin discrepancia alguna.Ahora, el Pleno deberá ratificar la decisión de la Comisión del Estatuto de los Diputados. Aunque el Reglamento del Congreso dice textualmente que el suplicatorio debe verse en el primer pleno ordinario inmediatamente posterior a la sesión en comisión, fuentes consultadas por ABC abren la puerta a que la cuestión se aborde ya en el pleno extraordinario del miércoles de la semana que viene, 22 de enero. Según estas fuentes, que citan a letrados de la Cámara Baja, la voluntad del legislador al fijar el primer pleno ordinario es que la discusión del suplicatorio «no se postergue innecesariamente» y nunca prohibir que se aborde el tema en un encuentro extraordinario, por lo que cabría incluirlo en el orden del día del próximo.Noticia Relacionada Y esquivando a Desokupa estandar No Irene Montero celebra la presentación de su libro arropada por cientos de personas Inés Ruiz-JiménezEl Alto Tribunal ya tomó declaración a Ábalos en condición de investigado de forma voluntaria, pero para continuar las indagaciones necesita permiso del Congreso porque, al ser diputado —del Grupo Mixto desde el estallido del caso Koldo, que lleva el nombre de quien fue su mano derecha en el Ministerio de Transportes, Koldo García —, tiene inmunidad por su condición de aforado. Ahora, la Comisión del Estatuto de los Diputados se muestra favorable a permitir que el Supremo continúe la acción judicial contra el exsecretario de Organización del PSOE y, previsiblemente, el Pleno adoptará idéntica posición cuando debata el suplicatorio.Recurso de amparo a la MesaÁbalos, este lunes, presentó alegaciones contrarias a la concesión del suplicatorio en un documento de 85 páginas. Este martes, el exministro ha elevado la misma argumentación a la Mesa del Congreso en un recurso de amparo, que este órgano podría estudiar en su reunión de este jueves. El socialista denuncia una «cacería política» contra él e investigaciones de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil previas a la concesión del suplicatorio. Esto, según él, vulnera sus derechos como diputado y es suficiente motivo para rechazar la investigación del Supremo porque obedece, dice, a una «motivación política» de la Benemérita en connivencia, añade, con el Partido Popular.Fuentes parlamentarias presentes en la reunión de la Comisión del Estatuto de los Diputados dicen que dejarán constancia de que Ábalos denuncia «irregularidades» en el procedimiento contra él, pero que esto no anula el fondo de la investigación del Supremo . Incluso el PSOE se ha mostrado desde el principio favorable a estimar el suplicatorio solicitado por el Alto Tribunal, algo que este lunes llevó a Ábalos a criticar que se le pidan explicaciones con una decisión tomada de antemano. Su partido le mantiene abierto un expediente de expulsión y él, mientras, agota todas las vías para defender su «inocencia».
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