Los primeros movimientos de Donald Trump en su regreso a la Casa Blanca ponen en riesgo uno de los pilares de las economías de México y Centroamérica: el envío de remesas desde Estados Unidos por parte de aquellos que han emigrado y sostienen a sus familias.Trump regresó al gobierno con la meta de deportar a millones de migrantes. Como se estima que once millones de personas viven indocumentadas en EE.UU., supone un golpe frontal para aquellos que dependen de los recursos que envían sus familiares.Tom Homan, designado por Trump como el próximo encargado de la frontera, ha dicho que los indocumentados «deben tener miedo». Propone crear una línea telefónica para recibir denuncian anónimas sobre personas ilegales, organizar redadas masivas y acelerar los procesos de deportación, aun si para esto debe contratar empresas privadas o utilizar a las fuerzas armadas.Noticia Relacionada estandar Si Sheinbaum niega que la caza al «cártel terrorista» de Trump viole la soberanía de México Milton Merlo Con un llamamiento a la independencia y la cooperación, la presidenta de México responde al nuevo inquilino de la Casa Blanca tras designar a estas mafias como grupos terroristasSegun informó ‘The Wall Street Journal’, Trump pretende llevar a cabo una gran redada masiva en Chicago. La misma duraría aproximadamente una semana y contaría con la participación de más de centenar de agentes. Según dicho diario, Trump eligió Chicago por su confrontación con el alcalde demócrata Brandon Johnson.Por otra parte, ‘The New York Times’ señaló que los países de Centroamérica han pedido una mesa de diálogo con Trump por la cuestión migratoria y este la rechazó.En México , por ejemplo, llegan al país entre 50.000 y 60.000 millones de euros anuales. Es el segundo país que más remesas recibe en el mundo. Se calcula que, a nivel nacional, 4,9 millones de hogares reciben recursos desde el extranjero. De acuerdo con datos de la Universidad de Guadalajara, cada envío es en promedio de 380 a 410 dólares, una cantidad de la que depende buena parte de la población mexicana. Especialmente en estados como Chiapas, donde el 15% de su PIB es de remesas, mientras que en Guerrero y Michoacán alcanzan el 10% aproximadamente.En el caso de Honduras, las remesas representan el 25% de su PIB. En 2024, el país centroamericano recibió 9650 millones de dólares desde el extranjero. Según datos oficiales, cada día alrededor de 300 hondureños abandonan el país con la meta de poder sostener a sus familias.Guatemala es otro territorio en riesgo por los planes migratorios de Trump. Es el segundo país de la región con más migrantes en EE.UU. Actualmente 3,2 millones de guatemaltecos viven en la primera economía del mundo. El año pasado aportaron 21.000 millones de dólares en remesas. Sin esos recursos, el país no podría comprar bienes básicos para el consumo de la ciudadanía ni importar combustibles. Según el Banco de Guatemalal, el 70% de la remesas que llegan provienen de los estados de California, Texas y Nueva York.
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