Si solo pudieseis elegir un plato para comer el resto de vuestros días ¿cuál sería? No son pocas las veces que uno se ha planteado esto, ya sea para uno mismo o para varias personas en algún grupo de conversación. Ya sea para romper el hielo o para conocer más a fondo a la otra persona.No será lo mismo que alguien te responda que estaría toda la vida comiendo brócoli, alubias o plátanos a que le de por el sushi, los macarrones o el pollo asado. ¿Acaso hay un plato del que no nos llegaríamos a cansar? .No se trata de elegir un ingrediente en torno al que podamos realizar distintas propuestas, sino elegir el plato definitivo con el que alimentarnos hasta la eternidad . Una elección bastante más complicada que elegir la película favorita, el mejor jugador que han visto tus ojos o lo que te llevarías sin dudar a una isla desierta, por mucho que parezca una cosa simple.Porque claro, ¿dónde queda eso que nos meten en la cabeza los profesionales del marketing alimentario de que hay que comer de todo o lo de que la dieta tiene que ser variada y equilibrada? Sobre todo a la hora elegir nutrientes esenciales con el placer añadido de disfrutar la comida.¿Han decidido ya? Quien lo tiene claro es Miodrag Borges , una de las figuras más relevantes en la actualidad en el ámbito de la nutrición y la microbiota en España. El autor del libro ‘Los 7 secretos (a voces) de la salud’ (Ed. Samarcanda) ha destacado en su cuenta de TikTok que si tuviera que elegir un único plato para comer toda la vida, optaría por los huevos con patatas .Un sencillo plato y una delicia que ofrece un equilibrio nutricional destacado además de ser accesible, tanto por coste económico como por su facilidad de preparación. Los huevos son una fuente de proteínas completas de alta calidad, además de aportar vitaminas del grupo B, sobre todo B12 y riboflavina, hierro y zinc. Las patatas, además, si se preparan hervidas o al horno, ofrecen carbohidratos complejos que nos aportan energía, potasio y fibra.«En ese contexto específico, como en tantos otros, la adherencia será la clave , aunque también disfrutar cada día. Tenemos que pensar en que hay momentos en los que los nutrientes pasan a un segundo plano. Y que hay que cuidar también nuestra parte emocional, nuestra parte hedónica y de disfrute de la comida», explica en el vídeo subido a las redes sociales este técnico superior en Dietética y también licenciado en Sociología y máster de Marketing y Comportamiento del Consumidor por la Universidad de Granada.
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