Groenlandia y la ambición de Donald Trump por hacerse con esta tierra cercana al Ártico lleva ocupando los titulares de los periódicos desde hace varias semanas. Sin embargo, hay un pequeño detalle a pie de página de todo intento futuro de venta, atañe directamente al Reino Unido y tiene que ver con un documento centenario. Tom Høyem, representante de Copenhague en la isla entre 1982 y 1987 y experto en su historia de esta isla, explicó en ‘The Times’ que u n compromiso de 1917, que es cuando Estados Unidos intentó adquirir la isla, sigue siendo válido . En virtud de ello, los británicos tienen derecho de preferencia en los términos que atañen a la venta de Groenlandia. «Si Trump intentara comprar Groenlandia, tendría que preguntarle primero a Londres», señaló Høyem. Y en este caso, al primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer. ‘No, no vale nada. Es solo hielo. No lo quiero’Para entender esta afirmación es preciso remontarse a un acuerdo de 1917 que tenía que ver con la compra del presidente estadounidense Woodrow Wilson de lo que hoy son las Islas Vírgenes de los Estados Unidos. Por entonces, EE.UU. pagó 25 millones de dólares a Dinamarca por su adquisición. Høyem, que es un político danés y alemán, cuenta que en medio de estas conversaciones, un importante empresario sugirió al presidente que también comprara Groenlandia. Una propuesta que inicialmente quiso descartar, «Wilson dijo: ‘No, no vale nada. Es solo hielo. No lo quiero’», afirmó Høyem.Pero Høyem cuenta que cambió de opinión e instó a los daneses a que incluyeran a Groenlandia en el acuerdo. Dinamarca, que no estaba por la labor, indicó que sólo seguiría adelante con la venta a EE.UU. si firmaba una carta en la que se dijera que Groenlandia «es y será siempre danesa». Wilson terminó accediendo. «Yo mismo he visto el documento original en un museo. Eso significa que Estados Unidos ha aceptado legalmente que Groenlandia es y siempre será danesa. Pero Trump, al parecer, nunca ha oído eso», apunta Høyem.Noticias relacionadas La NASA redescubre una base militar oculta bajo el hielo del tamaño de una ciudad cerca del Polo Norte ALEXIA COLUMBA JEREZ La CIA modificó su mapa de Marruecos con un detalle que tiene que ver con España, un cambio que atrae la atención tras la vuelta de Trump Alexia Columba JerezAl mismo tiempo, Reino Unido exigió tener el primer derecho de rechazo si se vendiera la isla. Esta petición de hace más de un siglo también se debió a que Canadá, que estaba bajo dominio británico, está relativamente próxima a Groenlandia , al otro lado del estrecho de Nares. Es más el historiador detalla que desde 2022, comparte una frontera terrestre en la pequeña isla Hans. Sin embargo, este no sería el único intento de adquisición, en 1946, el funcionario estadounidense del Departamento de Estado, John Hickerson, propuso pagar encubiertamente a Dinamarca 100 millones de dólares en oro por Groenlandia, según informó Associated Press. Y después de la Segunda Guerra Mundial, el presidente Eisenhower volvió a intentar adquirir Groenlandia. La consideraba un enclave de vital importancia geoestratégica para la seguridad de Estados Unidos y una cuestión que estaba dentro de la esfera de su influencia legítima. A día de hoy, y con la vuelta del magnate a la Casa Blanca, sigue en su punto de mira con el mismo argumento. Trump en redes redes señalaba: «Por motivos de seguridad nacional y libertad en todo el mundo Estados Unidos de América considera que la propiedad y el control de Groenlandia es una necesidad absoluta ». Que además, cuenta con tierras raras y recursos como uranio, oro, zinc y petróleo.«En modo crisis»Ante los actuales movimientos, Mute Egede, el primer ministro de la isla, en su discurso de Año Nuevo pidió la independencia completa de Dinamarca: declaró que «es el momento de dar el siguiente paso para eliminar las ataduras de la era colonial y seguir adelante». Y señaló que el referéndum podría celebrarse en abril, coincidiendo con las elecciones legislativas. Høyem está convencido de que los groenlandeses deberían quedarse con Dinamarca. Mientras, un funcionario reveló a ‘Daily Mail’ que «los daneses están en modo crisis, pero Trump no se dará por vencido».«Starmer intentará pasarle un brazo por encima del hombro a Trump»En cuanto a lo que pueda decir el Gobierno del Reino Unido en virtud de este acuerdo histórico, los expertos consideran que es poco probable que presente un obstáculo. Entre otras cosas porque Starmer está lidiando con una situación económica delicada y un intento de reactivar nuevos acuerdos desde el Brexit. Al tiempo que soporta a un Elon Musk que según ‘Financial Times’ ha estudiado cómo tumbar al gobierno de Starmer.A eso se añade que el reciente sondeo publicado por YouGov mostrara que el 53% de los británicos prefiere a la UE como socio comercial frente al 19% que está a favor de EE.UU. Dado que exportan mayormente a los países de la UE. Frente a este dilema, un asesor de Starmer declaró a ‘The Guardian’ que la estrategia del primer ministro supone organizar propuestas que le gusten a Trump: «No estamos sugiriendo que Keir se ponga a jugar al golf, pero intentará pasarle un brazo por encima del hombro a Trump mientras deja claros nuestros intereses nacionales». Y como recordaba a ABC Fernando Cortiñas, profesor del IE Business School, «Reino Unido es una potencia militar de las más grandes de Europa, y EE.UU. la ha usado como caballo de Troya en Europa, para jugar sus cartas en el Viejo Continente »El tema de qué posición adoptará Starmer finalmente sigue abierto, con voces discordantes. El portavoz de asuntos exteriores del Partido Liberal Demócrata, Calum Miller, dijo que Trump «no es un socio fiable que esté dispuesto a trabajar con aliados. El Reino Unido debería participar desde una posición de fuerza, en lugar de ir con la mano en alto ante un presidente que busca aprovecharse de cualquiera que muestre debilidad« .
Leave a Reply