La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha confirmado esta mañana lo que el organismo que preside ya avanzó ayer, que los aranceles anunciados el lunes por el nuevo presidente de los Estados Unidos tendrán una respuesta por parte de la Unión Europea. «Lamento profundamente la decisión de los EE.UU. de imponer tasas a las exportaciones europeas de acero y aluminio. Los aranceles injustificados a la UE no quedarán sin respuesta », ha aseverado en un mensaje esta mañana en la red social X. Sobre la magnitud de esa respuesta, Von der Leyen se ha limitado a decir que será «firme y proporcionada». Noticia Relacionada estandar No Los aranceles del 25% al acero y aluminio anunciados por Trump entrarán en vigor el 12 de marzo ABC El presidente estadounidense ejerce presión también sobre su gran rival, China, que desde la semana pasada está sujeta a aranceles adicionales del 10% además de los ya existentesHoy mismo el presidente Donald Trump ha firmado las órdenes ejecutivas que contienen esta nueva andanada de aranceles, la primera que afecta directamente a las exportaciones de la Unión Europea. Exactamente, consiste en una tasa del 25% a todas las importaciones de acero y aluminio, además de aranceles recíprocos a cualquier país que grave productos estadounidenses. Que esto tendría una respuesta estaba claro. A partir de ahí, está por ver en qué medidas concretas se traducirá. En el pleno del Parlamento Europeo, reunido hoy para estudiar el nuevo escenario de guerra comercial al que se enfrentan los 27, el comisario de Comercio, Maros Sefcovic, se ha limitado a decir que la UE aún analiza el alcance de las medidas que le han caído encima. «Cómo dije la última vez, siempre protegeremos nuestros intereses frente a medidas injustificadas en base a nuestros valores y ese momento ha llegado », ha asegurado el comisario. Todo esto, sin cerrar la puerta a la negociación. Sefcovic ha incidido en que la UE se mantiene abierta a un «diálogo constructivo» para encontrar soluciones «mutuamente beneficiosas donde sea posible». «Hay mucho en juego para ambas partes» y lograr que funcione es «de sentido común», ha zanjado. Precisamente, hoy mismo Von der Leyen va a reunirse en París con el vicepresidente de Estados Unidos, J.D Vance , en el que se convertirá en el primer encuentro entre la UE y la nueva administración estadounidense. Está por ver en qué terreno se mueve esa negociación, porque de telón de fondo está la amenaza de Trump, que asegura que elevará los aranceles en respuesta a las posibles medidas de represalia que puedan tomar los países importadores. Como es sabido, la andanada arancelaria del flamante presidente empezó con el anuncio de una tasa del 10% aplicada con carácter general a todas las importaciones de China y de otra del 25% para las de México y Canada, que sin embargo quedó en suspenso durante un mes después de que Claudia Sheinbaum y su homólogo canadiense, Justin Trudeau, se comprometieran a reforzar sus fronteras.En estos primeros días de gobierno, Trump está recurriendo a la orden ejecutiva como la fórmula más rápida para aprobar nuevos impuestos a las importaciones, que en muchos casos sirven como instrumento de presión de cara a la negociación -caso de Colombia. En lo que refiere al acero, la Casa Blanca considera que el régimen arancelario aplicado hasta la fecha «ha socavado los objetivos de seguridad nacional» de la industria de los productos mencionados», lo que ha «dado lugar a un aumento significativo de las importaciones de artículos de aluminio que una vez más amenazan con perjudicar la seguridad nacional de EEUU».Asimismo, el texto justifica los aranceles como «un medio eficaz para reducir las importaciones, fomentar la inversión y la expansión de la producción nacional de acero y mitigar el posible menoscabo de la seguridad nacional».
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