El precio de la vivienda sigue en ascenso en muchos países y cada vez más personas buscan alternativas que les permitan tener un hogar sin hipotecarse de por vida. Entre las opciones que han ido ganando popularidad, vivir en un barco se presenta como una posibilidad atractiva para aquellos que buscan libertad , contacto con la naturaleza y, en algunos casos, una solución más económica . Sin embargo, esta vida no es para todos. En ese sentido, Elizabeth Earle, una británica que lleva varios años viviendo en un barco, ha compartido con ‘Sky News’ su experiencia, detallando los costes y desafíos que implica esta forma de vida.Según reveló al canal de televisión británico, la joven, de 36 años, pasó s iete años recorriendo el mundo antes de darse cuenta de que comprar una casa no estaba dentro de sus posibilidades . Fue entonces cuando tomó una decisión radical y compró un barco por 4.500 euros utilizando sus ahorros. Y aunque las condiciones iniciales no eran las mejores; no tenía ducha, usaba un cubo como inodoro y pasaba frío, para ella, valía la pena.Tras dos años de renovaciones , logró venderlo por 24.000 euros , lo que le permitió comprar una embarcación más grande y cómoda de 21 metros y 100 años de antigüedad por algo más de 42.000 euros . Ahora, viviendo en los canales de Coventry, asegura que no cambiaría esta vida por nada. «Estoy en medio del campo, sin nadie que me moleste. Y si quiero irme, puedo hacerlo mañana mismo», afirma.¿Cuánto cuesta realmente vivir en un barco?Aunque vivir en un barco le ha permitido desconectarse del bullicio urbano y adoptar un estilo de vida más tranquilo, Elizabeth reconoce que no todo es idílico. Entre los desafíos más grandes, menciona los inviernos duros, el mantenimiento constante y la seguridad. «Si te quedas sin carbón y estás a dos millas del punto de abastecimiento, toca cargar 25 kilos a través del barro», explica.Asimismo, muchos creen que vivir en un barco es más barato que una vivienda tradicional, pero no siempre es así . Elizabeth gasta aproximadamente 5.400 euros al año en facturas , lo que equivale a unos 450 euros al mes. Esta cantidad incluye el seguro del barco , gas para cocinar, carbón para la calefacción, diésel y la licencia de navegació n del ‘Canal and River Trust’. Además, cada tres o cuatro años debe gastar alrededor de 1.400 euros en pintar el casco del barco para evitar la oxidación.Uno de los mayores desafíos es la gestión del agua y el saneamiento . Los barcos pueden tener distintos tipos de inodoros , desde sistemas con bomba hasta inodoros de compostaje, que es el que ella usa. «Vacío el mío cada tres semanas. Cuando puedo usar un baño normal en casa de un amigo, me parece un lujo increíble», bromea.Noticia Relacionada estandar No Así será el proyecto de la Ermita del Santo en Madrid: cuántas viviendas habrá, qué zonas verdes tendrá y cómo cambiará la zona Patricia Marcos El plan, aprobado el pasado miércoles, transformará esta zona del barrio de Los Cármenes con la construcción de nueva vivienda y zonas verdesEn cuanto a la ducha , en lugar de gastar su limitado suministro de agua, prefiere usar las instalaciones del gimnasio . «Puedo almacenar 700 litros de agua, que me duran un mes, así que me ducho en el gimnasio para no gastarla», explica.Cabe destacar que vivir en un barco ofrece una libertad difícil de encontrar en una vivienda convencional , pero también conlleva sacrificios . Para quienes buscan escapar del sistema tradicional de vivienda y no les importa lidiar con los desafíos del mantenimiento y la movilidad, puede ser una opción viable. Sin embargo, no es una solución para todos y antes de tomar la decisión de vivir en el agua, es fundamental conocer bien los desafíos que conlleva. Para Elizabeth, la elección ha valido la pena, pero no deja de recordar que, aunque es una vida hermosa, también es un reto constante .
Leave a Reply