Ineco se fundó en 1968 y su primer presidente, Carlos Roa Rico, fue un ingeniero de caminos. Su retrato está colgado en la sede y, en la web, posan delante de él el empleado más antiguo, que entró de botones y la empresa le ayudó a hacerse delineante y la incorporación más reciente, una abogada de 27 años. Ineco, fundada pues en el franquismo, sobrevive en 2025 con un presidente que ha tenido cargos en el PSOE, Sergio Vázquez, que cita en discursos que cuelga en Linkedin a David Bowie, sin venir mucho a cuento, y que se presta a contratar a una prostituta para que teletrabajo masajeando a un ministro del que fue jefe de gabinete. Progresismo, claramente. También ha progresado su plantilla. Nació con apenas 17 trabajadores y ahora roza los 6000, con un crecimiento notable en los últimos años. A la par, han crecido las protestas de los colegios de ingenieros, que la acusan de competencia desleal, de expandirse internacionalmente con el músculo de ser un medio propio del Estado y recibir encargos directos de la administración, sin concurso y con precios altos. Por este motivo, Tecniberia, que representa a empresas de ingeniería privadas, decidió expulsar a Ineco y a Tragsa, ambas empleadoras de la prostituta amiga de José Luis Ábalos. Las expusan por competencia desleal, no porque consideraran que Jessica afrontaba el mercado libre de la prostitución con un cómodo colchoncito mensual pagado por las empresas, claro está. La antecesora en el cargo de Vázquez fue Carmen Librero, ingeniera técnica aeronáutica y una de las pioneras del control aéreo en España. Para ser controladora área había que superar unas oposiciones rigurosas que no distinguían el sexo de los que se presentaban. No había cuotas, para que nos entendamos. Desarrolló toda su carrera en Aena, llegó a ser directora de navegación aérea en 2012 y, en 2015, accedió a la presidencia de Ineco, donde fue sustituida por Vázquez, que sabía mucho de gabinetes, con Pepiño Blanco y luego con Ábalos, además de tener experiencia en cargos orgánicos del PSOE. Lo sorprendente es que fue durante el mandato de Librero cuando se contrata a Jessica. Deprimente. Una mujer capacitada, con cargos técnicos con el PP y con el PSOE, que se presta a eso. ¿Podría no saberlo? Que lo explique. Es cierto que luego la cesaron de ese cargo y pusieron de sustituto al jefe del gabinete del ministro amante de Jesica. ¿Cómo traga Librero con eso? ¿Hay ciertos cursillos para la náusea de algunas mujeres que se ven obligadas a convivir con gente de la pandilla de Ábalos? ¿Los imparte Carmen Calvo, que también compartió gobierno de progreso con el valenciano? Un claro ejemplo de la apuesta del presidente del Gobierno que se declara más feminista por las mujeres de valía: defenestrar a una con sólida formación para poner a uno que queda muy pintón citando a Bowie en los discursos y que acabaría por tapar información sobre el sueldo de la prostituta en una empresa que nació para combinar, según Roa, un alto nivel científico con experiencia práctica en economía y coordinación del transporte. «¿Sabes leer?» le preguntó Koldo García a Jessica en su entrevista de trabajo. Pa dentro. Al menos la chiquilla dijo tener experiencia en Office, y no sólo en Wordperfect, como la mujer de Juan Espadas, líder defenestrado hoy del PSOE andaluz, enchufada en una empresa de la Junta de Andalucía. Pero, dicho lo cual, todo hecho en nombre del progresismo y del feminismo, que es, en la práctica, el atajo para el avance económico de unas pocas elegidas.
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