Pocos recuerdos están tan clavados en la memoria de todo niño o niña en Canarias que la imagen imborrable, la sensación, y la experiencia de la primera vez que conocieron a sus momias guanches . La quietud enigmática de las salas que acogen las momias aborígenes y que sirven de ‘cripta’ actual de un pasado que desapareció sin dejar ni un solo escrito ha alimentado la curiosidad de los más pequeños en Gran Canaria y Tenerife a lo largo de varias generaciones. La carta difundida por el Ministerio de Cultura que lidera Ernest Urtasun ha hecho tambalear este recuerdo. La ‘Carta de compromiso para el tratamiento ético de restos humanos’ ha puesto en marcha el proceso de retirada de estos vestigios. La primera: la momia guanche del Barranco de Erques . Ya no será exhibida y ha sido trasladada a un almacén del Museo Arqueológico Nacional de Madrid. «Es el momento de que vuelva a casa». Así lo subraya de forma decidida el director del Museo de la Naturaleza y la Arqueología (MUNA), Conrado Rodríguez, que recuerda que esta es una ‘batalla’ que ya acumula más de una decena de reclamaciones por parte del Cabildo de la isla. « Este es el mejor sitio en el que puede estar », afirma a ABC, no solo por cumplir con un estricto control de temperatura, humedad, medidas antiincendios, cristales especiales antirrobos, sistema de protección de parásitos, sino porque es »el contexto adecuado».Confiesa que «respeta» toda decisión, pero no entiende que «esconder a la momia guanche en un almacén fuera de contexto sea la mejor opción». Para que esté así, que «esté expuesta al público en su isla» integrada con la veintena de momias completas y parciales que conviven en este centro. «No es que deba venir, es que debe volver», puntualiza, en una repatriación reclamada desde 1975. Este varón adulto, de 1,62 de altura y tan bien conservado que casi parece dormido viajó como un excéntrico regalo en el siglo XVIII a Carlos III.MUSEOS DE TENERIFEEl director del Museo de la Naturaleza y la Arqueología (MUNA) de Tenerife, Conrado Rodríguez EFE/Alberto ValdésEl director del MUNA se confiesa convencido de que la momia regresará, más aún cuando el Museo Arqueológico Nacional de Madrid no contempla volverla a exhibir. Quizás lleve tiempo, porque la devolución de este aborigen canario podría desencadenar una oleada de reclamaciones de varias comunidades autónomas, ya que esta carta de Urtasun afecta a nada menos que 14.845 restos.El MUNA, que reúne entre 300 y 400 restos guanches, entre momias, cráneos y huesos, y conserva en su almacén elementos esqueléticos de cerca de 2.000 aborígenes, igualmente cumple con todos los preceptos del Ministerio de Cultura. «Son tratados con el máximo respeto, no se refieren a una persona concreta, están contextualizados, no suponen una ofensa a un grupo étnico o religioso, y cumplen con el objetivo de investigación«, detalla Rodríguez. Son piezas clave para »conocer la vida cultural y todos los fenómenos adaptativos de la población en las islas«, y en muchos casos la única pista que se conserva de esa vida aborigen que se perdió en el tiempo.Su homólogo en Gran Canaria, el presidente del Museo Canario en Las Palmas de Gran Canaria, Diego López, se ha mostrado igual de rotundo. «En este museo todo va a quedar como está, no se va a ocultar nuestra historia» . Aunque la carta no le afecta, confiesa que «además no estamos de acuerdo». Que se retiren los restos de la exhibición al público es algo que no comparte. «En esta sala lo que se respira es respeto, devoción y admiración». Diego López lo dice desde la sala Verneau del Museo Canario, que acoge la mirada eterna de más de 500 calaveras y media docena de momias. «Llevamos 145 años exhibiendo restos de personas en las mejores medidas higiénicas y de seguridad, con el máximo respeto y debidamente documentados». Eso no va a cambiar.Esta exhibición, además de ser el mayor atractivo del Museo Canario, conserva un ambiente que atrapa nada más entrar. «Sirven de fuente de conocimiento al público, no hay morbo ni otra intención que la de acercar una parte fundamental de nuestra historia y nuestro pasado». El conocimiento que aportan «es insustituible », subraya. «Las personas que defienden que se oculten los restos de antepasados son un número minoritario».El presidente del Museo Canario, Diego López, en la sala Verneau EFE/Elvira Urquijo Á.Las momias y los restos humanos «son una de las vías principalísimas para conocer la cultura antigua, y gracias a ellas se están obteniendo conclusiones sobre la dieta, cómo se organizaban, su estructura social, cómo se relacionaban entre sí, cómo trataban las heridas, si eran violentos…« Para López, »no le vemos dificultad a que se exhiban, hay restos en iglesias y conventos expuestos al público y la gente los visita« y eso »no es una falta de respeto« sino que genera sentimientos, y en el caso de los museos de Canarias, despierta la curiosidad de grandes y pequeños.Noticias relacionadas estandar No CULTURA El Cabildo de Tenerife ve «fuera de derecho» retirar la momia guanche Laura Bautista estandar No «Es una ofensa para los canarios» Canarias reclama su momia guanche, que pasará a un almacén en Madrid Laura Bautista«Aniquilando» dos veces a la cultura aborigenEl consejero de Cultura del Cabildo de Tenerife, José Carlos Acha, confía en que la momia guanche regrese a la isla. Ocultarla en un almacén «es matar dos veces a la cultura canaria », apunta, ya que después de la conquista fue absorbida y «volvería a morir» al no permitir que «lo que nos queda pueda verse, difundirse y entenderse a través de los museos».La momia de Erques se dice que es una de las que se recuperó de la ‘cueva de las mil momias’, un gran panteón aborigen envuelto en leyendas y misterios en el sur de la isla, entre Arico y Fasnia, y que en la actualidad nadie ha podido encontrar de nuevo. «Se lleva reclamando desde hace más de 50 años y la hemos pedido tres veces en los últimos años», la última el 13 de enero de este 2025. «Tenemos los protocolos hechos y tenemos la experiencia en el traslado de momias de Madrid, pero también desde otros lugares, como Argentina».Un grupo de momias del MUNA durante una tomografía axial computarizada (TAC) en 2020 museos de tenerifeEFE« Queremos que vuelva a su contexto histórico como pieza fundamental del museo», porque «son fundamentales para entender el pasado y se deben exhibir como se debe, porque son nuestros antepasados», y merecen «todo el rigor científico ». El MUNA «es un lugar serio, riguroso, sin excentricidad y donde los visitantes salen con una visión completa de lo que es el mundo aborigen».

Leave a Reply