La ministra de Igualdad, Ana Redondo , ha explicado este miércoles que no tolera las «incoherencias» en política al ser preguntada en un desayuno informativo de Europa Press, en el Hotel Rosewood Villa Magna de Madrid, por la investigación judicial aÍñigo Errejón , fundador de Sumar, por agresión sexual y las denuncias que ABC reveló del fundador de Podemos, Juan Carlos Monedero , por alumnas de la Universidad Complutense de Madrid. Sin ser lacerante contra su socio de Gobierno y su exsocio, Redondo ha dejado claro que en política «hay que ser coherentes y ejemplares» y que tiene claro que en el PSOE cuando se dan estas situaciones («Que lamentablemente se dan», ha apostillado) se aparta radicalmente a esos dirigentes del partido y se les retira tanto de la militancia como de cualquier cargo o autoridad orgánica. En este sentido, y para huir de cualquier contradicción en directo, la titular de Igualdad ha admitido una «gran decepción» con el exministro y excompañero socialista, José Luis Ábalos , por contratar a Jessica Rodríguez a través de un catálogo de ‘escorts’, quien declaró en calidad de testigo la semana pasada en el Tribunal Supremo (TS) en el marco de la investigación por el caso Aldama. Así como por las sospechas de asistencia de Ábalos a locales donde se ejercía la prostitución. Informaciones que trascienden en pleno despliegue de la agenda abolicionista y antiprostitución de Ferraz y que reivindica su ministerio de Igualdad y que dañan el discurso feminista del PSOE en pleno 8-M. Noticia Relacionada estandar Si El caso Ábalos y los pagos a su ‘escort’ torpedean la agenda antiprostitución en Ferraz Mariano AlonsoRedondo desliza de esta manera que bajo su criterio ha faltado contundencia tanto en Sumar -cuya líder, Yolanda Díaz , también se ha apartado del escándalo de Errejón y ha delegado las explicaciones en otros dirigentes del partido- como en Podemos para encarar estos dos casos que ensombrecen a la izquierda en plena semana del Día Internacional de la Mujer. Podemos también está evitando dar explicaciones sobre su fundador y descarga la culpa en los medios de comunicación. La ministra ha confirmado que asistirá a las dos manifestaciones convocadas en Madrid este sábado: «No me siento mal recibida en ninguna de las asociaciones feministas, en absoluto». La marcha convocada por la Comisión 8M tendrá lugar a las 12 horas mientras que la del Movimiento Feminista de Madrid empezará a las 18 horas.«Le tenía un respeto que por supuesto ha desaparecido»«Una decepción. Al compañero y político Ábalos le tenía un respeto que por supuesto ha desaparecido. Nadie nos pone una pistola en la cabeza para que entremos en una lista electoral y cuando lo haces tienes que ser consciente de que estás representando a cientos de miles de personas. Tienes que ser consciente de eso y tiene que dar respuesta desde la coherencia y la ejemplaridad», ha criticado la ministra. Redondo también ha mostrado preocupación por el discurso negacionista de la violencia de género del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump , en su primer gran discurso en el Capitolio. La ministra asegura que el Gobierno y su departamento están centrados en «combatir la ola reaccionaria» de la extrema derecha que representa Trump y «alimentan» sus satélites mediáticos en las redes sociales, el cual, considera, Vox replica en España. «Cuando queremos somos capaces de arrinconar a la extrema derecha y sacarles de las instituciones», ha defendido la ministra, que celebra la renovación del Pacto contra la Violencia de Género que se logró la semana pasada en el Congreso votado a favor por todos los grupos parlamentarios menos por Vox. «España ha liderado las políticas de igualdad, somos faro de muchos países en esta materia y tenemos que seguir en estando en esa línea de defensa de la democracia, la igualdad, la dignidad frente al trumpismo y al negacionismo», ha añadido. Blindar el aborto en la ConstituciónRedondo se ha mostrado abierta a estudiar la inclusión del derecho al aborto en la Constitución, de la misma forma que hizo Francia hace unos meses, pero admite que todavía no se dan las «condiciones necesarias para hacerlo» dado que es «enormemente complejo» al necesitarse una reforma constitucional agravada. «A mí me parece que es una buena manera de blindar los derechos sexuales y reproductivos y, sobre todo, la libertad de las mujeres. Y me parece que es una cuestión a estudiar», ha dicho.
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