Una soltera pierde la paciencia con su cita y amaga con plantarlo yéndose al baño a hacer una llamada: «No para de hablar»

Monts e (58) pasó de la ilusión por acudir a ‘First Dates’ a la decepción máxima al encontrarse con su cita. Es más, la mala impresión que fue forjando de Juan Carlos (65) a medida que fueron intimando no hizo más que empeorar durante la velada. Hasta que se hartó. En en mitad de la velada, sin soportar más la verborrea del hombre, la soltera se escabullía al baño para despotricar sobre él con una amiga. La mujer, una ‘mocatriz’ de Sevilla que destacó al presentarse todas sus dotes artísticas, asegurando que «canto, bailo y soy actriz», ha reabierto las puertas del amor tras un historial de relaciones poco exitoso. Buscaba un hombre «normal y activo», nada de perfiles de gimnasio o algo por el estilo. Noticia Relacionada First Dates estandar No Vuelan los cuchillos entre dos solteros en la decisión final de una cita María Robert Milena no sintió ninguna atracción por Jota, más bien todo lo contrario, pero le acabó echando la culpa de que la cita no prosperaraPero aunque no se mostró exigente en cuanto a su prototipo, lo cierto es que J uan Carlo s, un camarero jubilado malagueño, se llevó un chasco. «Esperaba que fuera un hombre más joven, tampoco de 20 años, pero que no sea como mi padre», lamentó ante el equipo del programa de citas de Cuatro . Sentados en la mesa, el soltero le comentó que era su cumpleaños. Una vez felicitado, Montse intentó dialogar sobre sus vidas. Pero para su desesperación, la cita se convirtió prácticamente en un monólogo de Juan Carlos . La sevillana apenas pudo intervenir, y poco a poco fue perdiendo la paciencia. «Mira que yo hablo, es la primera vez que me pasa esta situación», se quejaba. Montse sale espantada para llamar a una amiga Al cabo de un rato no lo soportó más. Sin contemplaciones, la soltera se levantaba de la mesa con la excusa de ir al baño. Nada más lejos de la realidad. Ni tardó poco como le prometió a Juan Carlos , ni su visita al servicio tenía nada que ver con las demandas de sus necesidades fisiológicas. Lejos de oídos indiscretos, la andaluza llamaba a su amiga para desahogarse con un amiga. « Ana , soy Montse . Escúchame es que le he dicho al hombre que me venía al baño, me ha tocado un hombre que tiene 65 años. Le veo mayor, me gustan los hombres más jóvenes y tú lo sabes», señalaba. Entretanto, el aludido compartía impresiones sobre la cita con una de las camareras de ‘First Dates’, aunque no iba muy bien encaminado con las sensaciones que estaba teniendo. No en vano, estaba convencido de que «a ella le gusto». Montse y Juan Carlos tomando la decisión final tras su cita CuatroMientras, J uan Carlos iba desesperándose por la tardanza y le vinieron los recuerdos de otra cita donde recibió un plantón parecido. «Me lo hicieron hace mucho tiempo y no apareció nunca», explicaba. En el excusado, Montse seguía pegando la hebra, quejándose de que «no para de hablar de lo suyo». Además, tampoco le había gustado que saliera poco. «No es sociable». Con todo, volvía a la mesa y retomaron la ‘conversación’ intentando pasar un rato lo más agradable posible. Aunque a la hora de la decisión final, Juan Carlos recibía las calabazas de Monts e , quien a pesar del ‘sí’ de su pretendiente, le dejaba las cosas claras. «No quiero una segunda cita. Yo creo que no tenemos nada en común y pienso que no quiero hacerte perder el tiempo», zanjaba.