Concluyen sin acuerdo las maratonianas reuniones en Arabia Saudí para negociar la paz en Ucrania. El ministro de Exteriores ruso , Sergéi Lavrov , ha pedido este martes a EE.UU. que «ordene» a Ucrania reactivar el acuerdo en el mar Negro, tal y como estuvo vigente en 2022. Moscú quiere que se que se levanten las restricciones que recaen sobre el comercio de cereales y fertilizantes rusos para que sus barcos puedan navegar por esta importante vía marítima. Necesitamos garantías claras (…) Esas garantías sólo pueden ser el resultado de una orden de Washington a (el presidente ucraniano, Volodímir) Zelenski».Este lunes, negociadores rusos y estadounidenses se reunieron nuevamente en Riad para avanzar en las negociaciones a fin de establecer una tregua de 30 días en Ucrania . El encuentro duró 12 horas y se aseguró que este martes habría un comunicado conjunto sobre el contenido de las conversaciones. Sin embargo, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov , ha anunciado en su habitual comparecencia ante los medios que «estamos hablando de negociaciones técnicas. Son negociaciones que profundizan en los detalles, por lo que, con toda seguridad, su contenido no se hará público, no es de esperar que se difunda».Peskov señaló que «se están analizando los informes en las respectivas capitales –Moscú y Washington–. Sólo después será posible hablar de algún tipo de aclaración». No obstante, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova , ha dicho este lunes que el jefe de la Diplomacia rusa, Serguéi Lavrov , comentaría este martes «algunos aspectos de las negociaciones» en una entrevista al Canal Uno de la televisión rusa.Noticia Relacionada estandar Si Rusia recluta drogadictos en Suecia para llevar a cabo sabotajes en su «guerra híbrida» Rosalía Sánchez | Corresponsal en Berlín Son menos llamativos y pasan inadvertidos ante las fuerzas de seguridad, que los clasifican como delincuentes habituales y no los asocian con una fuerza extranjeraLos propios funcionarios rusos afirmaron que, antes del establecimiento de un alto el fuego total y tras la moratoria de ataques contra infraestructuras energéticas, la idea ahora era poner fin a las hostilidades en el mar Negro, dejar de atacar puertos, normalizar la navegación y reanudar las exportaciones de grano.El portavoz de la Presidencia rusa ha afirmado además que los contactos entre Rusia y EE.UU. continuarán, pero ahora «no hay una fecha concreta para nuevas conversaciones». Peskov tampoco aclaró cuándo podría tener lugar otra conversación telefónica de Vladímir Putin y Donald Trump ni tampoco para qué fecha se podría organizar una reunión tripartita con Rusia, Estados Unidos y Ucrania .Por su parte, el senador ruso, Grigori Karasin , principal negociador en las conversaciones de este lunes en Riad, dijo a la agencia TASS que «se discutieron muchos problemas. Por supuesto, no todo fue resuelto ni hubo acuerdo en algunas cosas», pero calificó el encuentro como «útil». Subrayó que «un diálogo constructivo de este tipo era necesario» y vaticinó que ahora «debe implicarse la comunidad internacional, sobre todo Naciones Unidas, y otros países».Mientras tanto, negociadores estadounidenses y ucranianos han vuelto este martes a reunirse en Riad después de haberlo hecho el domingo. Se trataría en este momento de discutir los temas abordados en la víspera en la reunión de rusos y americanos. La embajadora ucraniana en Washington, Oksana Markárova , ha asegurado en una entrevista a ‘Bloomberg’ que su país «está dispuesto a detener las acciones militares sin límites de tiempo ni condiciones previas, pero para que se alcance un alto el fuego, Rusia también debe aceptarlo».En la práctica, el pasado día 18, Putin rechazó la tregua de 30 días y se limitó a aceptar solamente la moratoria de ataques contra instalaciones energéticas, de cuyo incumplimiento las dos partes se acusan mutuamente. El lunes en Riad ni siquiera pudieron acordar la extensión del alto el fuego al mar Negro. Y es que el presidente ruso insiste en la eliminación de las «causas profundas» del conflicto, según él, la ampliación de la OTAN, el «golpe de Estado» del Maidán en febrero de 2014 y la supuesta violación de los derechos de la población rusófona de Ucrania.El Kremlin pretende también quedarse, no sólo con los territorios ya ocupados por el Ejército ruso, sino también con lo que falta hasta llegar a los límites administrativos de esos entes, es decir, hacerse con las zonas de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia que todavía controla Kiev.

Leave a Reply