Los objetos de Freddie Mercury: ¿por qué su hermana los ha comprado en secreto?

Home People Los objetos de Freddie Mercury: ¿por qué su hermana los ha comprado en secreto?
Los objetos de Freddie Mercury: ¿por qué su hermana los ha comprado en secreto?

La historia de Freddie Mercury no terminó con su muerte en 1991. Tres décadas después, su legado sigue generando emociones intensas, no sólo entre sus millones de admiradores en todo el mundo, sino también entre quienes formaron parte de su círculo cercano. La subasta, en el 2023, de más de 1.400 objetos personales del líder de Queen, desde manuscritos hasta vestuarios icónicos, batió récords al recaudar más de 40 millones de libras, y destapó un drama familiar cargado de emociones, secretos y heridas no cerradas.Todo comenzó cuando Mary Austin , de 72 años, exprometida y heredera de la mayor parte de la fortuna de Mercury, decidió vender en Sotheby’s la colección de pertenecias que había guardado celosamente durante más de 30 años en Garden Lodge, la mansión que el propio Freddie le dejó. «Durante muchos años he tenido el privilegio de vivir rodeada de las cosas que Freddie tanto amaba» , declaró Mary. «Pero el tiempo ha pasado, y ahora siento que es momento de cerrar este capítulo tan especial de mi vida».te recomendamos La respuesta de Gerard Piqué y Clara Chía ante los rumores de ruptura Rocío F. de Buján Pedro Pascal ataca a J.K. Rowling por su comportamiento «asqueroso»: «Atroz fracasada» Marina Ortiz CortésLa declaración parecía sincera. No había señales de problemas económicos. Mary posee el 75% del patrimonio de Freddie, incluyendo derechos de autor y propiedades. Su decisión, según explicó, era puramente emocional. No se trataba de una venta parcial ni estratégica: decidió deshacerse de todo, casa incluida. «Si iba a hacerlo, debía ser valiente y venderlo todo» , dijo en una entrevista con la BBC. Y eso es precisamente lo que algunos defienden como la prueba de que la motivación no era económica, ya que con la venta de algunos bienes se habría arreglado un supuesto apuro. No era necesario dejar atrás una vida entera. Pero mientras Mary decía adiós al pasado, en silencio, alguien más actuaba para recuperarlo. Kashmira Cooke, hermana de Freddie, de 73 años, y su hijo, el empresario Jamal Zook, se infiltraron en la subasta. Según reveló el diario The Sun hace unos días, madre e hijo pujaron de forma anónima y gastaron cerca de 3,5 millones de euros para recuperar algunos objetos personales del cantante. La razón no habría sido económica ni simbólica, sino profundamente emocional: «Kashmira estaba enojada y dolida al ver que tantas pertenencias queridas de su hermano estaban siendo ofrecidas al mejor postor» , afirmó una fuente cercana.Sotheby’sLa subasta fue un evento global. Más de 140.000 personas visitaron la exposición en Londres, y hubo compradores de más de 50 países. Uno de los objetos adquiridos por Kashmira fue una chaqueta de estilo militar diseñada especialmente para el cumpleaños número 39 de Freddie, por la que pagaron más de 457.000 libras, una cifra muy por encima de su valor estimado. «Habían reservado un presupuesto enorme y quedaron satisfechos, a pesar de haber pagado mucho más de lo previsto» , explicaron las fuentes. Es importante señalar que, como es evidente, Kashmira no actuó desde una posición económica limitada. Ella también heredó un porcentaje de la fortuna, y su hijo cuenta con una situación financiera sólida gracias a sus actividades en el mundo de las inversiones, según la prensa local. Entre ambos, contaban con los recursos y la motivación para participar en la subasta y evitar que esos objetos cayeran en manos de coleccionistas anónimos.Sotheby’sPero más allá del dinero, este gesto habla de algo más profundo. Mary y Kashmira nunca fueron particularmente cercanas. Su relación fue distante, y en ocasiones, tensa . Mientras Mary fue la compañera más íntima de Freddie, aquella a quien él consideraba su «esposa» y quien estuvo a su lado en los momentos más duros, Kashmira vivió una relación más reservada y distante con su hermano.Y su decisión de comprar estas piezas a espaldas de Mary parece reflejar un desacuerdo profundo con la venta y una forma de proteger el legado familiar. En palabras de una fuente cercana: «Kashmira entiende cuánto se lo adoraba en todo el mundo, pero le entristecía imaginar que esos objetos tan personales terminaran en manos de desconocidos ».Y aunque algunos críticos han acusado a Mary de actuar con frialdad o incluso con codicia, la realidad parece más compleja. Su decisión de vender la colección y de poner en el mercado la casa de Kensington por 30 millones de libras no respondería a necesidades económicas, sino a un deseo de soltar, de dejar atrás. «La casa tiene amor y calidez en cada habitación. Ha sido un placer vivir aquí, pero ahora es momento de confiar esa paz a otra persona», declaró Mary en febrero de 2024.Sotheby’sAdemás, buena parte de los fondos recaudados fueron donados por Mary a la Mercury Phoenix Trust y a la Elton John AIDS Foundation, organizaciones benéficas que trabajan con personas con VIH/SIDA, un gesto que para sus defensores refuerza la idea de que, más que una ganancia económica, su intención fue rendir homenaje a Freddie a su manera.Además, si algo puede decirse con certeza del cantante es que amaba las subastas. Mary misma lo recordó: « No había nada que a Freddie le gustara más que una subasta. Le encantaban el arte, los objetos únicos, las historias detrás de cada pieza. Esto le habría fascinado ». En esa misma línea, Thomas Williams, especialista en mobiliario y artes decorativas de Sotheby’s, respondió ante la pregunta de si estos objetos no habrían estado mejor en un museo: «Freddie no quería un museo aburrido». Según Williams, él mismo expresó ese deseo tanto a Mary como a su asistente personal. «Esto es exactamente el tipo de evento que a Freddie le habría encantado», aseguró.Otro detalle importante es que Mary Austin no está sola. Tiene dos hijos adultos, Richard y Jamie, fruto de su relación con el pintor Piers Cameron, a quienes se espera que les herede su fortuna cuando fallezca. Ambos han llevado vidas discretas, alejadas del ojo público, y su existencia refuerza la idea de que Mary está preparando su legado no solo emocional, sino también patrimonial.Sin embargo, su decisión no fue compartida por todos. Brian May, guitarrista de Queen, fue tajante: « Los efectos personales más íntimos de Freddie , y los escritos que formaron parte de lo que compartimos durante tantos años, pasarán bajo el martillo, para ser dispersados para siempre. No puedo mirar. Para nosotros, sus amigos y familia más cercana, es demasiado triste», escribió en sus redes sociales antes del primer día de la subasta.Kashmira Cooke, hermana de Freddie Mercury RedesLa historia completa no está clara y ninguna de sus protagonistas ha hecho declaraciones sobre la venta pública y la compra secreta, símbolos del duelo por una figura que sigue siendo tan fuerte, que incluso sus recuerdos se disputan como si fueran parte de él. Como dijo el mismo Mercury, «The show must go on».

Leave a Reply

Your email address will not be published.