Grupos reducidos, planificación milimétrica y zonas con escasa vigilancia. Así operan las bandas especializadas en el robo de cable de cobre en zonas rurales como la que el pasado domingo generó el caos ferroviario en la línea de alta velocidad Madrid-Sevilla. «Suelen estar formadas por cuatro o cinco personas que se reparten el trabajo puesto que los robos se producen siempre en cuatro o cinco puntos como ocurrió el domingo», explica Daniel Timón, portavoz y secretario jurídico de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Castilla-La Mancha.El ‘modus operandi’ de este tipo de bandas es sencillo. Los ladrones se dividen en dos binomios que empiezan la tarea por cada uno de los extremos del área elegida para dar el palo. Cada pareja avanza cortando cable hasta que ambas se encuentran en el punto intermedio, donde cargan el material y huyen. Además, todo está calculado para minimizar el riesgo de ser interceptados ya que se aseguran al menos dos vías de escape . Además, en este caso, como el camino de servicio que utilizaron para dar el golpe, que es el habitual del personal de mantenimiento de Adif, está bien compactado, «en apenas 15 minutos» pudieron completar toda la operación .«Robo de manual»Aunque la Policía Judicial de la Guardia Civil de Toledo sigue investigando y mantiene abiertas tanto la hipótesis del robo como la del sabotaje, Timón, portavoz y secretario jurídico de la Asociación Unificada de Guardias Civiles en Castilla-La Mancha, tiene claro que se trata de «un robo de manual» . «Es el típico robo que sufrimos casi a diario», sostiene con rotundidad.De hecho, Castilla-La Mancha es la comunidad autónoma con más robos de cable de toda España. «El año pasado se registraron cerca de 800 incidentes en la región y casi el 60% de ellos ocurrieron en la provincia de Toledo », explica Timón, que añade que los delincuentes aprovecharon también la tarde del domingo porque saben perfectamente que en fin de semana el número de patrullas operativas de la Guardia Civil se reduce considerablemente.Noticia Relacionada estandar Si Los ingenieros alertan: «Es muy fácil robar cobre del AVE con total impunidad; hace falta vigilancia» Antonio R. Vega López-Escobar, decano del Colegio de Ingenieros de Minas del Sur, advierte del elevado daño causado con estas sustracciones«El pasado domingo por la tarde para cubrir la comarca de La Mancha toledana sólo había tres patrullas disponibles y la más cercana al lugar del robo estaba a 20 kilómetros», explica el portavoz regional de la Asociación Unificada de Guardias Civiles, que sostiene, debido a su experiencia, que este tipo de banda no actúan al azar. «Dan vueltas, comprueban por dónde se mueven las patrullas y eligen el momento y el lugar», explica Timón.«Lo tienen muy fácil»Además, estos ladrones especializados, en su opinión, no necesitan llevarse grandes cantidades para que les compense. «Lo tienen muy fácil. Con poco ya les vale, porque saben, además, que hay poca vigilancia y pueden repetir», señala.El portavoz de la AUGC en la región tampoco está de acuerdo con las manifestaciones del ministro de Transportes, Óscar Puente, cuando señaló que «el móvil económico es difícil de entender» para justificar que la hipótesis más plausible sobre lo ocurrido hace unos días era la del sabotaje causado con la «voluntad deliberada de causar un daño» en el trazado del AVE Madrid-Sevilla.«El botín obtenido fue de unos 150 metros de cable de cobre, equivalentes a 120 kilos. Teniendo en cuenta que en el mercado negro el precio es de unos 9 euros el kilo, estamos hablando de unos 1.000 euros. En 15 minutos, cuatro personas pueden llevarse a su casa 250 euros cada una. Nadie gana esa cantidad en tan poco tiempo; claro que es un negocio lucrativo», sentencia Daniel Timón.
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