Conocido históricamente como el ‘Derby della Lanterna’ (el derbi de la linterna), el enfrentamiento entre el Genoa y la Sampdoria es, sin duda, uno de los más coloridos y vistosos a los que se puede asistir en el fútbol europeo. Un partido en el que las gradas rugen y ambos fondos del Luigi Ferraris (o Marassi, por el nombre del barrio en el que está enclavado el estadio que comparten los equipos genoveses) se convierten en un mar de enormes e hipnóticos banderores. Una cita que desata pasiones en la ciudad de Génova y que esta temporada no ha podido disputarse al no coincidir ambos clubes en la misma división, distanciamiento de categoría que continuará el próximo curso, y que será aún más profundo, porque la histórica Samp consumaba este martes una dramática caída a la Serie C . Un terremoto para su hinchada, que jamás vio a su equipo en un peldaño tan bajo del fútbol italiano.Noticia Relacionada José Juan Romero estandar No El curioso ingeniero de ascensos idolatrado en Ceuta: «No sé nada de fútbol, de la vida todo» Jorge Abizanda El entrenador andaluz, artífice del regreso del club caballa a Segunda división después de 45 años de ausenciaPor primera vez en su historia, la Sampdoria cae a la Serie C. Un drama después de una calamitosa campaña en la que el conjunto genovés ha recurrido a cinco porteros diferentes, ha alienado a 38 jugadores y ha intentado agarrar la salvación con el libreto de cinco entrenadores. El empate en la última jornada en la visita a la Juve Stabia (0-0) fue el golpe definitivo para un equipo que en 1992 llegó a pelear por levantar la Champions en la final en la que el barcelonista Koeman, con su recordado gol de falta en la prórroga, rompió ese gran sueño. Nacida en 1946 de la unión entre el Sampierdarenese y el Andrea Doria, el descenso de la Samdporia a la Serie C es un mazazo más para un equipo por el que han ido desfilado algunas de las grandes figuras del fútbol mundial hasta que entró en caída libre. Después de caminar en los últimos años por el alambre, en el curso 2022-23 no pudo evitar perder la categoría en la Serie A. Un palo para un club que en 1991 conquistó la liga italiana, que tiene cuatro títulos de Copa (1985, 1988, 1989 y 9994) y que fue campeón de la Recopa de Europa en 1990, torneo en el que también fue finalista un año antes. Crisis que se ahonda con el nuevo desplome de categoría. En estos 79 años de historia ha disputado 66 en Serie A y 13 en Serie B.Leer la lista de grandes jugadores que han pasado por el vestuario de la histórica Sampdoria resulta interminable. Guiada por los italianos Mancini, Gianluca Vialli y Gianluca Pagliuca, acompañados por la fantasía del brasileño Toninho Cerezo, ganaba la Serie A de 1991, un éxito en el que el carisma de Vujadin Boskov desde el banquillo resultó fundamental. Burrito Ortega, Juan Sebastián Verón o Roberto Mancini aparecen como nombres legendarios en la historia de un conjunto por el que también desfilaron ilustres del banquillo como César Luis Menotti.Derbi con nombre propioLa caída a la Serie C supone un varapalo para una ciudad partida en dos por el fútbol. Las sonrisas de los aficionados del Genoa contrata hoy con el llanto de la hinchada de la Sampdoria. Una de las rivalidades más calientes de Europa que ha convertido al derbi genovés en uno de los más espectaculares a nivel de grada. Un partido con nombre propio, el ‘Derby della Lanterna’, denominación tomada del principal faro del puerto de la ciudad, la ‘Torre della Lanterna’. Un antagonismo alimentado por el hecho de que el Genoa es el equipo más antiguo de Italia, mientras que la Samp es el de más reciente fundación (no teniendo en cuenta refundaciones de actuales clubes).A lo largo de la historia, este derbi ha dejado miles de anécdotas, como la protagonizada por hinchas de la Samp en 1981, cuando soltaron al césped decenas de conejos al campo vestidos con la camiseta del Genoa. Una invasión que obligó a interrumpir el partido durante más de una hora. Dos años después, los ultras de la Sampdoria volvieron a recurrir a la burla animal y pasearon por el campo a un primate que lucía la elástica de un jugador del Genoa. Un partido siempre peculiar y especial que la próxima temporada no podrá verse en Italia y que los aficionados de la Samp se preguntan hoy cuántos años volverá a verse en la Serie A.
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