La increíble tardanza del Gobierno a la hora de aclarar las causas del apagón del pasado 28 de abril está provocando que cientos de millones en indemnizaciones continúen en el aire. El Estado dispone de varias vías para dilucidar el asunto: a través de la empresa gestora del sistema (Redeia), la investigación del regulador (CNMC) y la de la Justicia. Sin embargo, da la impresión de que el Gobierno no quiere que ninguna de estas investigaciones avance, comunicando información a cuentagotas y con poquísima credibilidad. Como publicamos hoy, el sector asegurador comienza a inquietarse, porque aunque los daños entre particulares parecen estar dentro de un orden, el súbito parón que supuso el apagón pudo causar daños importantes y cuantiosos en maquinarias industriales y en procesos fabriles. Las compañías necesitan saber dónde radican las causas del apagón porque eso no sólo define el tipo de responsabilidades, sino la cuantía de las indemnizaciones.
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