El policía municipal de Madrid que fue detenido por presuntamente provocar la muerte de un atracador en Torrejón de Ardoz , cuando se encontraba fuera de servicio en una celebración, quedó ayer en libertad. La juez de Instrucción número 1 de esa ciudad, lo mantiene acusado por un delito de homicidio imprudente, penado con entre uno y cuatro años de prisión. La Fiscalía pidió el ingreso en prisión provisional por homicidio doloso, pero no ha sido concedida. El ayuntamiento de la capital lo ha apartado del servicio y ha abierto un expediente disciplinario.El agente estaba adscrito a la Comisaría Integral del Distrito de Barajas, aunque, según ha podido saber ABC, era liberado del sindicato UGT desde hacía unas dos décadas, por lo que no patrullaba las calles. De cualquier modo, las fuentes consultadas precisan que esa condición no es relevante para el asunto en cuestión. Rosa Robledano, de Servicios Públicos de la organización en Madrid, explica a ABC que «se le ha suspendido temporalmente de su labor sindical», a la espera de cómo transcurra la instrucción. «No tenemos apenas información, estamos a lo que digan el juzgado y la autopsia», afirma. El martes por la noche, sobre las once y media, el policía madrileño, de 58 años, estaba celebrando la jubilación reciente de su cuñado, también de 60 y que también había sido miembro del Cuerpo. En un momento dado, salieron a fumar un cigarro a la puerta del restaurante donde se encontraban. Entonces, según explicaron, pasaron dos varones marroquíes y arrebataron el teléfono móvil a uno de ellos. Se inició una breve persecución a la carrera por las calles de las Calderas y de la Pesquera, hasta que placaron a uno de los delincuentes, Abderrahim Akkouh, de 36 años.Noticia Relacionada En libertad con cargos estandar No La juez imputa por homicidio imprudente al policía que asfixió a un ladrón en Torrejón Carlos HidalgoEl funcionario de Barajas se tiró sobre él y lo retuvo con la técnica del mataleón (asfixia apretando el cuello con un brazo); su cuñado, con signos evidentes de haber bebido alcohol, se le unió, con poca fortuna. En los dos vídeos de los hechos que circulan, se ve a este segundo, de gran peso, tambalearse, golpearse con un bolardo y caer al suelo. Una joven que presencia la escena intenta quitarlo de encima del magrebí dándole unas patadas, pues aprecia que el ladrón está inconsciente, y recogió el móvil sustraído. Una mujer le pide a los dos policías que aflojen la maniobra de ahogamiento, porque el delincuente se ha desmayado. Sin embargo, el policía no ceja y lanza improperios: «¡Subnormal! ¿Acaso te ha robado a ti?». Avisan de que está llegando la Policía. Abderrahim yace inconsciente y son los agentes de Torrejón los primeros que, utilizando un desfibrilador, intenta sacarle de la parada cardiorrespiratoria que sufre. Luego, los sanitarios del Summa 112 lo intentan resucitar durante 30 minutos, sin éxito. Confirmaron el óbito allí.Al arrestado se le ha retirado el pasaporte y también tiene que ir al juzgado cada lunes a firmar. La imputación por homicidio imprudente es provisional y puede variar conforme se practiquen las diligencias de investigación. Al cierre de esta edición, no se conocía el resultado preliminar de la autopsia. El juzgado número 1, que le tomó ayer declaración, se ha inhibido en el 4 de la localidad torrejonera, que era el que estaba de guardia la noche de los hechos y ordenó el levantamiento del cadáver, informan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.Abderrahim AkkouhABC ha podido saber, asimismo, que el delincuente marroquí sumaba más de 40 reseñas policiales; de hecho, el atracador había salido de prisión el pasado 25 de mayo. Era un habitual de la zona y tenía una drogodependencia muy avanzada, que lo tenía muy deteriorado. De hecho, esa misma tarde había sido parado por la Policía de Torrejón cuando estaba fumando basuco (base de cocaína). De ahí la importancia de la autopsia, pues deberá confirmar si murió por la asfixia o sus patologías previas ayudaron a que falleciera. La Asociación Unificada de Policía Municipal (APMU) considera que «hay que respetar las investigaciones judiciales y no se puede criminalizar ni politizar, como hace Más Madrid»: «Lo sucedido ni es maltrato institucional ni racismo, y no pueden marchar la imagen de nuestro Cuerpo».
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