Joan Laporta, Luis Enrique y Ernesto Valverde tendrán que declarar como testigos por el caso Negreira, por el que un juzgado investiga los pagos del Barça al que fuera número dos de los árbitros españoles José María Enríquez Negreira, por un presunto delito de corrupción deportiva. Así lo ha acordado la instructora, Alejandra Gil, en una providencia consultada por ABC, tras la petición de la Fiscalía Anticorrupción, que considera que sendas declaraciones son «especialmente relevantes» para las pesquisas, aunque todavía no ha fijado la fecha para escuchar al actual presidente del club y a los dos técnicos.En su escrito, que los fiscales formalizaron el pasado mayo, reclamaron citar a Laporta para que de explicaciones sobre el motivo de los pagos a las sociedades de Negreira y su hijo, Javier Enríquez, durante su primera etapa al frente del club, entre 2003 y 2010.En cambio, respecto a Luis Enrique y Valverde, Anticorrupción quiere que aclaren qué información recibieron sobre los informes relativos a los colegiados que iban a arbitrar los partidos del Barça cuando ellos ejercían como técnicos del club. En el caso del primero, entre 2014 y 2017, y de ese año a 2020, el segundo. Ya que una de las justificaciones que el equipo aporta sobre los pagos a Negreira es la supuesta elaboración de esos documentos por parte del exdirigente del Comité Ténico Arbitral (CTA). Pide así Anticorrupión que ambos entrenadores detallen también si tenían «eficacia real» de cara al planteamiento de los partidos. Todo ello, después de que este mismo junio, la Audiencia de Barcelona rechazase los recursos de algunos de los investigados por el caso Negreira, y mantuviese la prórroga de las pesquisas que acordó Instrucción 1, a cargo de las mismas. Además, Xavier Estrada Fernández, el árbitro que formalizó la querella por corrupción deportiva y que ejerce la acusación particular en la causa, también reclamó enviar el caso a juicio, al entender que los informes de la Guardia Civil acreditan «sin lugar a dudas» el ‘modus operandi’ denunciado, al entender que el citado ilícito se consuma con el simple ofrecimiento o solicitud de un beneficio o ventaja y, por tanto, no necesita que se produzca el resultado deportivo pactado. Pero el tribunal también descartó su petición. Entre otros, porque hasta la fecha sólo se ha tomado declaración a uno de los investigados, el propio Negreira, que se acogió a su derecho a no hacerlo. Por eso, indicaron los magistrados de la Audiencia, podría «resultar la necesidad de practicar nuevas diligencias, tales como el rastreo de dinero o de testificales de personas que pudieran corroborar, por ejemplo, la versión que sobre determinados hechos puedan dar los investigados que no han declarado», que es lo que ocurrirá ahora. Cabe recordar que los expresidentes del club Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu tenían que haber declarado ya como investigados, pero la cita se pospuso por compromisos anteriores de sus respectivas defensas.
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