«Voy a noquearle en el primer asalto», vaticinaba Ilia Topuria durante la semana de la pelea en conversación con este periódico, consciente de que tenía la oportunidad de convertirse en la cara de la mayor liga de artes marciales mixtas (MMA) del mundo. Y, por la experiencia en pleitos pasados, El Matador había dictado sentencia. Estaba escrito en piedra. El atleta hispanogeorgiano ha logrado multiplicar su leyenda, al proclamarse campeón mundial del peso ligero de la UFC , tras noquear en el primer asalto a un peleador tan legendario como el brasileño Charles Oliveira, consiguiendo entrar en el selecto grupo de los dobles campeones, algo que solo nueve peleadores han logrado antes en la historia de la organización estadounidense. Topuria tenía clara la estrategia. Si Charles continuaba con su esencia natural, la de pelear siguiendo el patrón de ir hacia adelante, caería de manera fulminante. «Oliveira me va a ayudar, porque será él mismo el que me favorezca el rango de pegada», decía en los días previos. Pero no era creíble. No en alguien con más de 45 combates profesionales. La realidad es que el brasileño lo hizo. Y le salió mal . El pleito no llegó ni al ecuador del primer asalto. Pasados los dos minutos de pelea, El Matador conectó un gancho de derecha , para rematar la faena con un croché de izquierda y un par de manos más que no pudo ya evitar el árbitro de la contienda cuando Oliveira estaba tendido sobre la lona.Noticia Relacionada estandar No Topuria noquea a Oliveira en el primer asalto y hace historia como doble campeón de UFC Jose Soriano y Álvaro Colmenero ‘El matador’ venció por KO a Charles Oliveira alzándose con el título de peso ligeroLo había vuelto a hacer, había doblado su leyenda, esa que rezaba que había nacido para ser «irrepetible». El hispanogeorgiano ha irrumpido para derribar la barrera del nicho de los deportes de contacto en España. Para demostrarles que estaban equivocados. Quiso doblar la apuesta, jugarse todo a la carta de que la victoria sobre Oliveira era inevitable. «Si pierde, el golpe será doblemente grande», apuntaban algunos análisis previos. Pero el golpe lo aterrizó Topuria sobre el brasileño, noqueando al estigma que supone ser una superestrella en un deporte todavía incomprendido en nuestro país. Las artes marciales mixtas españolas gozan de una salud de hierro, tener a un gigante deportivo, al mejor del planeta, es algo que se cuenta con los dedos de una mano, la misma que necesitó Topuria para acabar llevando del suelo a su oponente. «No te olvides de llevar la almohada», le decía entre bravuconadas Topuria, pero el destino ya estaba escrito: 2 minutos y 27 segundos duró un combate que ya tenía un ganador seguro. Se suele decir que los estilos hacen las peleas y el del hispanogeorgiano es, hasta el momento, indescifrable para los mejores peleadores de la UFC. «Creo que tenemos una superestrella para muchos años. Tiene una posición muy sólida», apuntaba Dana White, presidente de la UFC, tras la pelea entre el brasileño y el hispanogeorgiano. Y es que Do Bronx, que ostenta el récord de victorias por sumisión de la historia de la UFC , tuvo su momento dentro del combate cuando se tiró, a la desesperada, a por una pierna de El Matador. Quería tratar de atrapar la extremidad de Topuria y buscar un nuevo sometimiento. Pero ni con esas. No encontró petróleo. Oliveira fue fiel a su estilo , como se esperaba pero no debía hacer, y se encontró con un nocaut tempranero en contra. Se expuso. Y cavó su tumba, inconscientemente. Se apagaron las luces. También las de Charles. Lo había conseguido, Topuria se convertía en el campeón del peso ligero de la UFC, un cinturón que estaba vacante por la ‘escapada’ del que era el monarca de la división y enemigo del hispanogeorgiano, el daguestaní Islam Makhachev, quien a su vez busca convertirse en el campeón del peso wélter (77,1 kilos). El Matador conquistaba su segunda categoría de peso, siendo el décimo en conseguirlo, y sentándose en la mesa donde comen las mayores leyendas de la historia de una disciplina que no para de crecer. Fue una hazaña histórica. Pero esto no acaba aquí. Todo parece indicar que su siguiente compromiso está escrito. Paddy Pimblett, su acérrimo rival, entró a la jaula y protagonizaron un encontronazo. «Represento a la nueva generación de MMA. Este es el siguiente nivel en el juego, esto es lo que yo represento. Hice lo que planeé». El Matador se encaró con el de Liverpool para intercambiar unas palabras y advertirle de que su futuro también está escrito y pasa por la misma parada que sus tres rivales anteriores: un nocaut de película. La historia está servida, solo falta confirmar si el ‘Beatle’ será el siguiente. En la lista figuran otros nombres como Arman Tsarukyan o Justin Gaethje, del que Topuria dijo que era el más merecedor de la oportunidad en ABC a falta de solo 48 horas de volver a saborear la gloria. Pero no es tiempo de pensar en el futuro. Es el momento de vivir en el presente y celebrar que se ha vuelto a hacer historia. Ilia Topuria ha vuelto a poner a España en lo más alto de las MMA y se convierte en la nueva cara de la compañía . El Fernando Alonso o el Rafa Nadal que necesitaba el deporte de mayor crecimiento a nivel mundial. Topuria, tras noquear a Alexander Volkanovski, Max Holloway y Charles Oliveira, se sienta a comer en la mesa de las mayores leyendas de este deporte. Ser doble campeón supone grabar su nombre junto al de los mejores de la historia. Jon Jones, Georges Saint-Pierre o Conor McGregor ya no son personajes a los que admirar, son atletas a los que El Matador podría superar si algún día consigue el mayor objetivo dentro del deporte, el que nadie ha logrado jamás: proclamarse campeón en tres divisiones dentro de la UFC. Nadie dijo que fuera fácil. Pero tampoco imposible. Nada lo es para Topuria.
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