Si Terelu Campos tuviese que borrar un mes del calendario ese sería el de julio. En pleno verano de 1984 y a punto de cumplir los 19 años, estando de vacaciones en casa de su tía Leli en Málaga recibió la trágica noticia de la muerte de su padre, José María Borrego . «Tu padre ha tenido un accidente», me dijo mi tía. Yo la miré y le respondí; No, no, mi padre está muerto. Sentí algo al ver su cara, pensé que había sido un accidente de camino al trabajo y no había sobrevivido», recuerda emocionada la presentadora . «No fue un verano triste, fue devastador».Recuerda perfectamente todas las horas posteriores y sobre todo aquella noche «cierro los ojos y se me viene la imagen a las puertas del tanatorio de Marbella. No me dejaron entrar, nunca vi a mi padre muerto. Al principio me generó un enfado enorme porque no entendí esa prohibición. Me acuerdo hasta de como iba vestida, con un pantalón negro, una blusita rosa claro con palmeras pequeñas en tono negro y una coleta muy tirante».te recomendamos… estandar No De su declaración de amor a Plex hasta la pulla contra Sebastián Yatra: así fue el último concierto de Aitana en Madrid Daniella Bejarano estandar No Juango Ospina, tras el recurso de Daniel Sancho: «No existe ni una sola prueba que avale su inocencia» Daniella BejaranoSu madre, María Teresa Campos viajó corriendo hasta Málaga para estar con sus hijas y se las llevó corriendo a casa de su abuela. «Quería contarnos lo que le había pasado a mi padre porque ya había salido un artículo en un periódico en el que decían que había muerto manipulando su arma». Según Terelu, no hizo falta que lo dijese porque según arrancó «me iluminé y dije lo ha hecho. Nos había comentado alguna vez su intención de quitarse la vida , pero nunca pensé que llegaría hacerlo. Me equivoqué», explica.El año pasado se cumplieron 40 años y todos los años va a visitarle al cementerio. «No me gusta ir a Marbella, me trae malos recuerdos, voy exclusivamente para visitar el nicho de mi padre y aprovecho para comer con algunos amigos que están allí». Tardó 25 años en perdonarle lo que les hizo y ahora le gusta hablar con él y pedirle que las ayude y las proteja siempre. «Cuando llega este mes no pienso porque con ese pensamiento no vivo y tengo que vivir. A finales de julio de 2018 también me operaron del segundo cáncer de mama…».«No me he tapado nada porque me parecía una estupidez cubrirme los brazos o la tripa si la gente ya me ha visto en el reality»Entre medias Terelu ha vivido veranos maravillosos con su madre y con su hija Alejandra. «Íbamos al hotel Meliá del Mar en Palma de Mallorca donde disfrutábamos de la calita que tiene dentro, al Coral Beach en Marbella, donde mi hija ha sido muy feliz o en el balneario de La Toja, donde fui el primer año Alejandra. Me tuve que marchar a Marbella porque hacía tanto frío, que no podía estrenar toda la ropita de verano que le había comprado. Y allí celebré por primera vez en la vida mi cumpleaños, el 31 de agosto».Esta misma semana la presentadora ha protagonizado la portada de la revista ‘Lecturas’ con su ya tradicional posado veraniego, este año ha cambiado el bañador por el bikini. «Trabajé durante tres años como colaboradora para Lecturas y como parte de ese contrato, Luis Pliego, el director, me pidió el posado y ahora ya se ha quedado como una costumbre. Yo no le doy mayor importancia y pensé que este año al haber participado en ‘Supervivientes’ no les interesaría porque estaría muy vista. Por eso también este año no me he tapado nada porque me parecía una estupidez cubrirme los brazos o la tripa si la gente ya me ha visto en el reality. Solo me he tapado con el bikini porque me siento insegura y solo lo uso en la piscina de mi casa de Málaga». Malditos complejos, aunque a la mayor de las hermanas Campos la televisiva isla le ha quitado muchos complejos . «Solo le he pedido a Lecturas que me igualase el tono de piel pero la gordura que tiene mi cintura es la real, los brazos…todo».La portada de ‘Lecturas’ que tanto ha dado que hablar y a la que se refiere Terelu Campos.Le cuesta recordar un amor de verano «Estamos hablando del Jurásico (ríe). Con 16 años fui por primera vez a Ibiza con mi madre que le tocó un viaje en la radio. Conocí a un sueco Janet rubio, guapísimo, tanto que parecía una chica, le pidió permiso a mi madre para cogerme de la mano y me escribió después una carta, pero se quedó en eso…». Este verano está centrada en el trabajo presentando la segunda parte de ‘Fiesta’ el magazine de fin de semana de Telecinco, donde recuerda con nostalgia grandes hitos de nuestro país y que muchos han visto como un claro homenaje a su madre. «Muy feliz yendo y viniendo a Málaga, pero muy agradecida de que sigan contando conmigo y disfrutando de mi nieto». En el aspecto sentimental ninguna novedad «no quiero complicarme la vida a estas alturas, ni vivir con un hombre, ni tener relaciones íntimas… Entonces prefiero no engañar a nadie».

Leave a Reply