Gibraltar no frena su política expansionista sobre aguas españolas ni en la fase más crítica de las negociaciones que Reino Unido, la Unión Europea (UE) y España llevan años manteniendo para buscar un encaje de la colonia británica en la Unión tras el Brexit . Las elecciones al Parlamento europeo primero, y las británicas del pasado 4 de julio después, supusieron un parón «a los avances» que, según las partes, habían registrado las conversaciones, que siguen teniendo no obstante asuntos enquistados. El principal es la negativa de Gibraltar a que policías españoles realicen los controles Schengen en el puerto y el aeropuerto del Peñón si desaparece la Verja para propiciar lo que España define como una zona de prosperidad compartida y que el Peñón también ansía. Ahora parece inminente que se retomen las conversaciones. Está por ver si Gibraltar volverá a sentarse en dicha mesa negociadora como ya ha hecho. Se trata de una fase decisiva en la que Gibraltar ha dado otra vuelta de tuerca con el inicio de las obras para construir otro macroproyecto sobre aguas españolas . La Corona española, el 13 de julio de 1713, mediante el Tratado de Utrecht, cedió a Gran Bretaña «la ciudad y castillo de Gibraltar juntamente con su puerto, defensas y fortalezas que le pertenecen pero no el istmo, ni las aguas adyacentes, ni el espacio aéreo suprayacente, que son espacios de soberanía española» como viene manteniendo desde entonces España, que reivindica la soberanía de dicha aguas pero que ha venido permitiendo desde hace décadas que Gibraltar siga expandiéndose sobre las mismas.107 millones de eurosLa promotora TNG Global ha comenzado con los trabajos. Lo está haciendo con piedras procedentes de una cantera de Málaga que entran en camiones desde España por la Verja para construir el dique del proyecto denominado Cape Vantage —algo que traducido al castellano sería algo así como Cabo de Ventaja o Ventajoso— por el que dicha empresa ha pagado ya al gobierno del Peñón en torno a 107 millones de euros. El proyecto está cifrado en 390 millones y será edificado entre la zona Este y Bahía Catalana.Recreación de TNG Global de cómo quedará el proyecto abcSegún TNG Global, Cape Vantage está concebido como un complejo residencial «de alta calidad». Será, según detalla, una zona residencial con instalaciones culturales, de ocio y comerciales unidas por plazas públicas ajardinadas. Serán aproximadamente 300.000 metros cuadrados de espacio residencial con más de 2.500 apartamentos. Además de un hotel de 21.000 metros cuadrados, se construirán 25.000 metros cuadrados de locales comerciales y 20.000 de tiendas. La urbanización incluirá un puerto deportivo, edificios y zonas con espacios abiertos integrados, zonas ajardinadas y aparcamientos. Y todo ello, se destaca, con vistas al mar.La promotora reconoce además sin tapujos la expansión por mar de Gibraltar: «Gibraltar es uno de los territorios más densamente poblados del mundo y ha satisfecho la creciente demanda de espacio mediante la recuperación de tierras. Alrededor del 10% de Gibraltar es tierra ganada al mar. Cape Vantage adoptará esta técnica y una nueva línea costera para el territorio». Blanco y en botella.Desde el Gobierno de España, que cuando se anunció el proyecto alertó de la ilegalidad del mismo, se asegura que ha protestado por estos nuevos rellenos. Fuentes oficiales del Ministerio de Asuntos Exteriores aseguraron hace tan sólo unos días a ABC que España «ha venido protestando reiteradamente por las acciones de relleno y modificación de la costa que Gibraltar realiza en aguas territoriales españolas cada vez que éstas se han producido y lo seguirá haciendo». Según las mismas fuentes, estas protestas se han realizado «por escrito en numerosas ocasiones porque estas acciones son contrarias al Derecho Internacional , además de implicar una vulneración de las normas españolas y europea de protección del medio ambiente». La última denuncia pública se produjo el jueves. Espeleólogos y ecologistas, agrupados en la Plataforma Ciudadana por la Protección de la Sierra de la Utrera, en Málaga , denunciaron «la masiva» extracción de piedras de este enclave natural para los rellenos. Sostienen que el proyecto autorizado por las autoridades del Peñón consiste en la construcción de una nueva escollera en la costa este con materiales extraídos de la Sierra de la Utrera, situada en el municipio malagueño de Casares, lo que afectará de manera «gravísima este extraordinario espacio natural». Según Ecologistas en Acción, el proyecto puede requerir de 50.000 toneladas.Desde el gobierno de Gibraltar se aseguró a ABC que no entra en la decisión privada de la empresa sobre dónde adquiere el material. Respecto a los rellenos nos remitió nuevamente a la resolución de julio de 2014 de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión de la UE , que dictaminó, tras las quejas recibidas por parte de España en 2013, que no fue «posible identificar una violación de la normativa medioambiental comunitaria con respecto a las actividades de búnkering, los rellenos en la Zona Este y Bahía Soberana», ni en los bloques de hormigón colocados para crear un arrecife artificial y evitar que pescadores españoles faenaran en este caladero histórico.

Leave a Reply