La imposición del ministro José Luis Escrivá como gobernador del Banco de España por parte de Pedro Sánchez ha roto los puentes de negociación entre el PSOE y el PP; los populares se bajan de cualquier posible negociación sobre los principales cargos institucionales del país tras la decisión adoptada por el Ejecutivo. Y este panorama de plena desconfianza da vía libre a La Moncloa para tomar también la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sin pactar con el principal partido de la oposición. El nombre de Escrivá solo es el principio. Ante la negativa del PP de entrar a negociar tras lo ocurrido , el Gobierno también elegirá al subgobernador del Banco de España y de cara a final de año encara varios nombramientos más que al menos deberían tratarse con el consenso del principal partido de la oposición, como en otras ocasiones.Noticia Relacionada estandar No Óscar López sustituirá a Escrivá como ministro de Transformación Digital ABC El actual jefe de Gabinete del presidente del Gobierno será ministro tras la marcha de José Luis Escrivá al Banco de EspañaLa CNMC tiene cinco puestos vacantes en el consejo, el principal órgano de gobierno. Tradicionalmente, entre sus diez miembros suele haber personas propuestas por los dos principales partidos y también hay otro tipo de cuotas como la vasca y catalana; esto se debe a que es necesario contentar a la mayoría ya que el Congreso tiene capacidad de veto. Esos cinco puestos iban a ser abordados en el diálogo PSOE-PP para que los populares pudieran nombrar al menos uno tras pactar la renovación de la cúpula del Banco de España, pero ya no será, tal como está la situación en este momento. En la actualidad, lo que queda del consejo no tiene ya representación del PP. Cani Fernández, la presidenta, fue propuesta socialista, igual que las consejeras Pilar Sánchez y María Jesús Martín. Carlos Aguilar fue planteado por Unidas Podemos como cesión a los socios y Josep Maria Salas por ERC. Aparte, siguen en el órgano Bernardo Lorenzo (vinculado al PSOE) y Xabier Ormaetxea (vinculado al PNV), pero que se mantienen con el mandato caducado desde 2023 a la espera de ser sustituidos.Las otras tres vacantes son por las salidas el año pasado de María Ortiz (la última que quedaba de los nombrados en su día a propuesta del PP) y Pilar Canedo (que representaba a Ciudadanos), además de por el fallecimiento del vicepresidente Ángel Torres. A estas dos primeras se les permitió abandonar el consejo cuando terminó su mandato y que no tuvieran que continuar hasta que se propusieran sustitutos.Del total de cinco miembros por cubrir, fuentes parlamentarias señalan que lo lógico habría sido que el PSOE nombrara al vicepresidente, el PP a dos consejeros y los otros dos recayeran en otras fuerzas políticas. Ahora, con los puentes de negociación rotos, todo apunta a un equilibrio distinto con el PSOE llegando a escoger tres miembros y cediendo uno al PNV y otro a Junts. De esta manera, el consejo de la CNMC tendría pleno del PSOE y sus socios. En la CNMV , por su parte, el panorama no es tan urgente pero sí atañe a sus dos miembros principales, el presidente y la vicepresidenta. Rodrigo Buenaventura y Montserrat Martínez terminan mandato este fin de año y aunque podrían ser renovados dos años más según la ley, estaba previsto un cambio que pudiera salir de esa negociación con el PP. Ahora, el Gobierno tiene vía libre para poder tomar la decisión a su antojo y ubicar a perfiles afines. En el caso de Buenaventura su elección en 2020 generó un consenso total en los grupos parlamentarios pero no fue así con Martínez, a quien la vinculan al ala socialista y, de hecho, ha sonado como nombre en el Ejecutivo para ser la futura subgobernadora del Banco de España. Así las cosas, todos estos cambios hacia perfiles socialistas y de sus aliados podrían coincidir en el tiempo con decisiones que deben tomar ambos organismos sobre una de las operaciones de la década: la opa de BBVA sobre Banco Sabadell , en la cual el Gobierno se ha posicionado totalmente en contra, de momento. Competencia tiene sobre la mesa la operación, que previsiblemente hará pasar el expediente a segunda fase para realizar un análisis más a fondo. Eso también retrasa los tiempos de la opa. El veredicto de la CNMC en este caso puede ser favorable, favorable con condiciones o veto. La CNMV, en su caso, tiene que evaluar el folleto de la opa y aprobarlo o no para que se pueda abrir el proceso de aceptación.

Leave a Reply