Los casi tres años que habían pasado desde la última Conferencia de Presidentes convertían a la cumbre de este viernes en Santander en un evento extraordinario. Un «acontecimiento planetario», ironizaban algunos de los barones territoriales convocados. De nuevo, 1.006 días después de la última reunión de este tipo, celebrada en La Palma en 2022, los líderes autonómicos se veían las caras en un mismo recinto con el presidente del Gobierno. Cónclave al que el Ejecutivo había llegado a regañadientes – obligado por el Tribunal Supremo – y que trató de solventar con buenas palabras y ningún acuerdo. «Vinimos sin propuestas y nos vamos sin respuestas», resumía Carlos Mazón, el presidente valenciano, que en su primer evento fuera de su comunidad desde la tragedia de la dana centró buena parte de la atención de sus compañeros. Tras un breve encuentro con el Rey, que departió antes durante algunos minutos con Sánchez en solitario, los presidentes autonómicos accedieron a la sala prevista para la reunión. Un espacio no excesivamente grande, donde se había situado una larga mesa sobre la que reposaban varias carpetas con folios en blanco. «Esa ha sido la prueba definitiva de que no había ningún tipo de interés en llegar a acuerdos», explicaba uno de los barones del PP, decepcionado por cómo se había desarrollado una reunión que el Gobierno calificó como «éxito» en palabras de Ángel Víctor Torres , ministro de Política Territorial. Visiones antagónicas de un mismo evento. El primero en intervenir en el mismo fue el presidente del Gobierno, que desgranó una serie de propuestas para cada uno de los asuntos incluidos en el orden del día que desde dentro de la reunión calificaron a ABC como «vacías de contenido». « Sánchez ha convertido este foro, que en su estructura es muy útil, en un espacio de reflexión y no de acuerdos. Ylo hace porque no tiene mayoría para alcanzar los pactos que quiere. Por eso no ha preparado nada y ha venido aquí a contar solo lo que le viene bien a sus socios», señalaban fuentes del gobierno popular de Aragón, en referencia a la propuesta estrella del presidente del Ejecutivo, que anunció la convocatoria del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) para el próximo mes de enero. Noticia Relacionada Conferencia de presidentes estandar Si La oposición califica de «decepcionante» la negativa a condonar parte de la deuda ABC Critican a Rueda por defender la estrategia del PP frente a los intereses de GaliciaUna vieja reivindicación del Partido Popular, pero que venía con trampa, pues Sánchez solo quiere abordar ahí la posible quita de deuda a las comunidades y no el nuevo modelo de financiación autonómica. Un asunto con el que pretendía dividir a los presentes y que resultó un fracaso, pues los barones del PPse mantuvieron firmes al rechazar las condonaciones de las deudas sin ligarlas a un nuevo modelo que acabe con la infrafinanciación que sufren algunos territorios como la Región de Murcia o la Comunidad Valencia. De hecho, fue esta última la que cobró protagonismo por este asunto, al pedir la madrileña Isabel Díaz Ayuso que, «si hay que perdonar alguna deuda, debería ser la de Valencia», golpeada brutalmente por una dana que ha agravado una situación financiera que ya era límite antes del 29 de octubre. Una propuesta que comparten todos sus compañeros, pues la «excepcionalidadde la situación provocada por la riada sí merece un movimiento extraordinario», apuntan otras fuentes territoriales del PPconsultadas por ABC. Lo que descartan todos los territorios es una quita lineal y, menos aún, desligada de un nuevo sistema de financiación que el presidente del Gobierno no se comprometió a presentar en enero. «Nos da la sensación de que lo que interesa de ese CPFF es la quita que beneficia a las que tienen más deuda, especialmente Cataluña», denunció el andaluz Juanma Moreno , quien aseguró marcharse «muy preocupadotras escuchar las palabras del presidente en las que ha confirmado la bilateralidad de unos españoles sobre otros. Nos tememos que use la quita como un parche y eso es inaceptable».A vueltas con el tiempoSánchez alargó su intervención para desvelar las propuestas que no había trasladado hasta ese momento a los presidentes, calificadas de «generalidades» por varios de los presentes. En materia de vivienda, pidió aplicar la actual ley del ramo y anunció una reforma de la ley del Suelo que ya intentó sin éxito el pasado verano. Para solucionar la crisis migratoria, se limitó a solicitar el «reparto solidario» de los menores no acompañados y a pedir a las comunidades que se sumen a la «política migratoria responsable y solidaria, basada en la ciencia y no en los prejuicios» del Gobierno. Para entonces, los rostros de incredulidad eran mayoría en la sala. Por último, Sánchez anunció un fondo de 223 millones para financiar « la adopción y desarrollo de nuevas soluciones sanitarias basadas en Inteligencia Artificial », pero no asumió ningún compromiso con la creación de nuevas plazas de MIR , que ligó en cualquier caso a la «cofinanciación de las autonomías».Acabado su turno, sin límite temporal, comenzó el de los barones territoriales, tasado esta vez en diez minutos que el propio Sánchez se encargó de controlar con celo selectivo, apercibiendo a algunos presidentes y dejando hacer a otros. «A Illa y a Pradales no les ha llamado la atención al pasarse con el tiempo. Tampoco a Ayuso. No se atrevía», señalaba con un punto irónico una persona de una de las delegaciones territoriales del PP. No tuvo miramientos Sánchez con Emiliano García-Page, al que instó a ir acabando antes de que el socialista le plantara cara. «Ya lo sé, presidente, pero si prorrateo los temas por los tres años que lleva esta conferencia sin convocarse…», señaló. García-Page abogó por un acuerdo entre PSOE y PP que blinde la financiación y la aleje del «chantaje» de ERC. Especialmente feo resultó el gesto hacia Mazón, que se alargó más de la cuenta al tener que hablar de la dana y sus consecuencias en Valencia , y también al vicepresidente de Melilla, al que cortó sin miramientos al llegar exactamente a los diez minutos. «Usted no es presidente, no puede alargarse más», le espetó según algunos de los presentes en la sala. «Ha sido de vergüenza ajena», explicaban esas fuentes. Acabada la reunión, el balance era diametralmente opuesto. Satisfechos en el Gobierno – «ha sido un éxito» , señaló el ministro Torres– y decepcionados en las autonomías. «No se ha comprometido a nada y no nos ha respondido a preguntas de cómo se puede conjugar la bilateralidad multilateral o la multilateralidad bilateral que tanto pregona», expuso Mazón, que agradeció la propuesta de Ayuso sobre la condonación de la deuda a Valencia por la dana, pero que exigió que se haga dentro de un modelo más justo de financiación. Consejo de Ayuso a IllaLa presidenta madrileña y Sánchez se saludaron con frialdad. Un tímido apretón de manos que reprodujo también con Salvador Illa, al que recomendó aplicar en Cataluña las recetas económicas de Madrid . «Si Madrid y Cataluña fuéramos de la mano, seríamos imparables en Europa», señaló. Fuentes cercanas a la madrileña reconocieron su deseo de tender puentes con el presidente catalán, aunque «es complicado en estos momentos». Illa confrontó abiertamente con la presidenta madrileña, acusándola de confundir Cataluña con los independentistas.Ayuso sí cargó contra Sánchez durante su cara a cara. Después de que el presidente hubiera hablado de «Estado compuesto» para referirse a España, la madrileña le contestó que «somos un Estado de las autonomías, no federal. Por eso, si alguien quiere cambiarlo todo, que lo lleve en su programa». En lo único que hubo consenso fue en que Barcelona sea la sede de la próxima conferencia . «Me parece una buena propuesta que la presencia del Estado en Cataluña sea lo suyo y lo normal», dijo Ayuso. Illa fue el primer presidente catalán en asistir con normalidad a un cumbre de este tipo, foto con el Rey incluida.
Leave a Reply