El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , ha presumido ante los embajadores españoles de que España es, en términos económicos, un «pata negra ibérico». La analogía elegida, empleada durante el discurso en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores ante los representantes de nuestro país en el extranjero, no es casual. Como el mismo Sánchez ha explicado, se refiere a la portada que en el año 2012 publicó ‘The Economist’ durante el Gobierno de Mariano Rajoy -en el peor momento de una crisis económica que comenzó en tiempos de José Luis Rodríguez Zapatero- con un toro y el término ‘pain’ -dolor en inglés-, haciendo un juego de letras con la palabra Spain. Ahora, según ha presumido, y en un contexto muy diferente al de la grave crisis del euro de hace ya una década, el mismo semanario anglosajón ha elogiado la situación de la economía española, algo de lo que Sánchez ha presumido esta mañana. A los 130 jefes de misión que, entre ayer y hoy, se reúnen en Madrid, en la IX Conferencia de Embajadores , Sánchez les ha pedido que difundan el mensaje de que España va como un tiro, que entre las prioridades del Gobierno sigue estando que apuesten por la promoción y defensa de las lenguas oficiales en las instituciones europeas y les ha dicho, además, no alentará «jamás una deriva militarista que nos aboque a una nueva carrera armamentística», aunque en los países de la UE llevan tiempo clamando por aumentar el gasto en defensa para luchar contra la amenaza que supone Vladímir Putin y la incertidumbre que genera la inminente llegada de la administración de Donald Trump a la Casa Blanca. Conferencia de Embajadores Pedro Sánchez en la Conferencia de Embajadores donde ha rememorado la famosa portada de ‘The Economist’ de 2008, que se puede ver en la imagen. EP Y THE ECONOMISTConsciente de la inestabilidad del marco geopolítico actual, sobre el nuevo Gobierno de EE.UU., Sánchez se ha mostrado abierto a tener unas buenas relaciones. Ha recordado que el continente europeo está flanqueado por 18 países, de los cuales 16 «sufren la presencia de grupos terroristas activos; cinco están en guerra, seis han padecido golpes o intentos de golpes de Estado y nueve han virado hacia formas autocráticas de gobierno». De ahí que nada más comenzar su intervención, denunciara el intento de magnicidio contra Donald Trump el pasado mes de septiembre y asegurase después que «España quiere seguir profundizando y afianzado» las buenas relaciones con EE.UU., al que considera «un aliado imprescindible».Noticia Relacionada estandar No Albares no reconoce a Maduro como dictador tras su toma de posesión, algo que sí ha hecho Mónica García Angie Calero El ministro Exteriores desea a los venezolanos «una solución dialogada, política»Ante las amenazas crecientes, Sánchez consideró que «es evidente que es necesario reforzar nuestra industria de la seguridad y la defensa ». Asumió que «tenemos carencias en este ámbito, sobre todo en el ámbito de la ciberseguridad», pero aún así advirtió de que él no comparte el inicio de «una nueva carrera armamentística». «El mundo tiene prioridades más urgentes», destacó, al tiempo que añadió que «en ningún manual está escrito que la paz y la seguridad se conquisten reforzando arsenales».Según Sánchez «la seguridad va mucho más allá del gasto en defensa» y afirmó que es más importante combatir «la seguridad climática y la necesidad de prepararnos para combatir sus efectos » Y en este punto recordó la «desgracia» que ha vivido Valencia por la catastrófica dana, aunque Sánchez lleva sin visitar las localidades afectadas desde el incidente en Paiporta el pasado 3 de noviembre, cuando utilizó a los Reyes como escudo para visitar la zona cero y tuvo que salir corriendo porque su seguridad estaba en peligro ante el cabreo e indignación de los paiportinos, sumidos en el dolor por haberlo perdido todo y la desesperación al ver que no llegaba la ayuda del Gobierno.Un mundo «más hostil y antagónico»A lo largo de casi una hora de intervención, Sánchez ha reivindicado también una España abierta al mundo y en contra del proteccionismo por el que apuestan cada vez más países, una España que defiende los valores de la Constitución en «un mundo cada vez más hostil y antagónico», que busca una Europa «débil y desunida».Tras la intervención de ayer del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel, Albares, y la de hoy de Pedro Sánchez, Felipe VI clausurará esta tarde la IX Conferencia de Embajadores.
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