Ha llegado la hora de la verdad para el exportavoz de Sumar Íñigo Errejón. Fuera del partido y del Parlamento, afronta este jueves su primera comparecencia ante el juez que investiga la denuncia de agresión sexual que la actriz Elisa Mouliáa interpuso en su contra en plena tormenta por la publicación de comentarios anónimos que le señalaban por conductas de ese tipo. Será en el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid a partir de las doce y media de la mañana. Sin embargo, el foco está sobre ella, que llegará a las once con la credibilidad afectada por las declaraciones que ha venido ofreciendo a los medios de comunicación y la estrategia de su anterior abogada. Fuentes jurídicas consultadas por ABC subrayan que el recorrido del asunto dependerá así de la congruencia en su relato y de que aporte algún elemento más de prueba, puesto que hasta ahora, sólo ha mostrado los mensajes que intercambió con una amiga expresando su decepción con el político. Han pasado más de tres años de los hechos que relata. Sería clave contar con algún testigo. De acuerdo a las fuentes de su defensa sondeadas por ABC, Mouliaá acude con la disposición de ratificar su denuncia, no se espera un giro de guión a última hora. Eso sí, tratará de complementar el relato, parco en detalles pero sobre todo en contexto, que ofreció en comisaría aquel día de octubre en que Errejón anunció su dimisión perdiendo el aforamiento y ella, que le oyó justificarse en términos como «dinámicas patriarcales», se dirigió a interponer una denuncia. Noticia Relacionada estandar No El juez descarta posponer la declaración de Errejón, citado el jueves, como su denunciante Isabel VegaLo que contó Mouliaá es que tras un tiempo hablando con Errejón por mensajes en una red social, él la invitó a la presentación de uno de sus libros. Acudió, tomaron algo después y aunque notó que la situación no fluía, se vio en el compromiso de invitarle a acompañarla a un evento que tenía a continuación, una fiesta en casa de un amigo . Fue al subirse al coche que les llevaría cuando percibió en el político un cambio de actitud que desencadenaría, siempre según su versión, los acontecimientos. Primero, en el ascensor que les subía a la fiesta, donde se abalanzó sobre ella para besarla y la intimidó. Luego, en la fiesta, la agarró en determinado momento del brazo, la introdujo en una habitación, cerró con pestillo y la tiró sobre la cama para a continuación, echarse encima de ella, todo, sin su consentimiento. La denuncia relata que ella, bloqueada, consiguió salir de allí aduciendo que no podía dejar a su amigo solo y aceptando que, como le proponía Errejón, en unos minutos se irían juntos a su casa. Y llegaron, y la situación se repitió, pero algo había cambiado: el padre de la actriz la había llamado avisando de que su hijo tenía fiebre. Ella se plantó, él paró y ella se marchó del lugar. Los ‘blancos’ en el relatoLo que no quedó explicado, de acuerdo a las fuentes consultadas, es qué elementos influyeron en que tomase la decisión de entrar en la fiesta con él tras lo ocurrido en el ascensor o acompañarle hasta subir a su piso tras la sucedido en la fiesta. También sobrevuelan dudas acerca del contacto que siguieron manteniendo por mensajes unos días después, un par de breves intercambios en los que no se abordó el asunto. Por último, está el tiempo transcurrido, lo que ha pasado en su vida desde entonces y las razones que aquel día, la llevaron a presentar la denuncia. De todo esto podrá dar cuenta a preguntas del juez Adolfo Carretero y su nuevo abogado, Alfredo Arrién, un perfil muy conocido en los juzgados de Instrucción de Madrid, pero también de la Fiscalía y de la defensa de Errejón que despliega la letrada Eva Gimbernat , cuyo empuje ha permitido que la declaración se convoque: la anterior abogada de Mouliaá, que aceptó el caso estando en un avanzado estado de gestación, solicitó aplazamientos por no encontrarse en condiciones y el instructor optó por archivar el caso hasta que estuviese lista para representar a la acusación. Un recurso de Gimbernat dio la vuelta al asunto, calificando de fraude procesal esa estrategia que alargaría sine die la pena de banquillo de su cliente, privado de la posibilidad de defenderse en el juzgado ante lo que tachó de «falsa denuncia», quizá esperando que hubiese más mujeres que dieran el paso de denunciarle por hechos análogos. Esto, por cierto, no ha ocurrido. Sólo la ex concursante de Gran Hermano Aída Nízar movió ficha contra Errejón en los juzgados. Se ha archivado. Una vez reabierto el caso y con el calendario fijado ya, fue ella quien solicitó algo más de tiempo para poder preparar la defensa atendiendo a lo que dijese Mouliaá en la sala. Tendrá pocos minutos para hacerlo, porque han sido convocados con hora y media de diferencia , margen suficiente como para que no tengan que cruzarse en los pasillos, pero muy justo para preparar la declaración si afloran elementos nuevos.
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