Después de Adeslas, Asisa. Esta mañana la compañía ha anunciado que también permanecerá en el concierto sanitario de Muface , confirmando la paulatina resolución de una crisis que desde noviembre mantiene en vilo a 1,5 millones de empleados públicos. Ya son dos las compañías que deciden presentarse al concierto, después de que el Gobierno se aviniera a hacer lo que las aseguradoras llevaban meses reclamando y ofreciera un aumento de las primas del 41%. De las que ya prestaban asistencia, solo está pendiente el regreso de DKV, que aún es una incógnita. Y entre las que no estaban, por su parte, hay candidatos nuevos. Mapfre y Sanitas han asegurado que están estudiando los pliegos; también AXA, según confirmaron fuentes de la empresa a ABC. El renovado interés por un concierto que en algún momento de estos últimos tres meses parecía cercano a la desaparición -con el Ministerio de Sanidad presionando para que así fuera-, claro está, se explica por las nuevas condiciones. La primera oferta (con una subida del 17%) hizo que sucediera lo que no había pasado en medio siglo y la licitación quedara desierta. Entonces las aseguradoras denunciaron que el contrato que venció en 2024 ha arrojado unas pérdidas totales de 600 millones de euros para las compañías. A esto, el Gobierno respondió con una segunda propuesta que contemplaba un aumento presupuestario del 33,5% y que solo convenció a Asisa. Tras muchos dimes y diretes y ampliaciones de plazos, finalmente a finales de enero el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, que es el competente, puso sobre la mesa 4.808 millones de euros para el período 2025-2027, un 41,2% más que la prima media que se aplicaba en el anterior concierto.Noticia Relacionada Lagunas en su atención sanitaria estandar Si El PP pide explicaciones al Gobierno por la avalancha de quejas de mutualistas Bruno PérezEn un comunicado, Asisa ha agradecido al Ejecutivo «el esfuerzo que ha hecho la Administración para mejorar la financiación e introducir algunos elementos que añaden equidad al modelo«. Con esto último se refieren a la introducción en los pliegos de la oferta de un mecanismo que plantea primas progresivas en función de la edad. Era otra de las reclamaciones de las aseguradoras, un incremento para los grupos más veteranos que se adecuara mejor a los riesgos reales.Haciendo balance de lo ocurrido en estos meses, la compañía ha querido reivindicar que «siempre se ha mostrado dispuesta a participar en Muface». A su vez, también ha puesto en valor el «diálogo» mantenido con Función Pública en los últimos meses, que según Asisa ha permitido «dotar al nuevo concierto de elementos que deben servir para empezar a corregir los desequilibrios económicos que la mutualidad ha acumulado durante décadas y se han agudizado en los últimos años». Es decir, que la decisión tomada hoy no es el fin del camino. En el comunicado la empresa reivindica la necesidad de un «plan ambicioso que permita afrontar con determinación los desequilibrios económicos del mutualismo administrativo y garantizar su pervivencia, que es necesaria para miles de profesionales sanitarios». Hoy se ha garantizado la continuidad del modelo «a corto plazo», se lee en la nota, pero para la compañía está pendiente «un diálogo con la Administración para impulsar ese proceso de transformación».Todo esto, sin embargo, no solventa el perjuicio causado hasta ahora a los funcionarios. El sindicato CSIF, que es el mayoritario en la Administración, asegura haber recibido cientos de denuncias de empleados públicos y familiares que durante estos meses han sufrido retrasos y cancelaciones de citas. De hecho, el pasado diez de febrero pusieron los hechos en conocimiento de la Fiscalía para que esta dirimiera las posibles responsabilidades de las aseguradoras.
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