«Elegí el piso porque estaba cerca de Ferraz y de mi universidad»

La declaración de la expareja de José Luis Ábalos ayer en el Tribunal Supremo, donde reconoció haber vivido gratis en un piso con un precio de alquiler de 2.700 euros, así como haber cobrado de dos empresas públicas sin asistir en ningún momento a su puesto ni hacer nada, dejó algunas frases «impactantes» para las fuentes jurídicas que la presenciaron. Según se investiga en el Tribunal Supremo, habría sido el empresario Víctor de Aldama, investigado por presuntamente pagar comisiones ilegales a Ábalos para conseguir contratos públicos, quien habría costeado el piso de la mujer que mantuvo una relación sentimental con el exministro, según ella, hasta noviembre de 2019. Continuó disfrutando, sin embargo, de la vivienda hasta 2022 y también estuvo contratada por mediación de Koldo García, mano derecha de Ábalos, en Ineco y Tragsa. Éstas fueron algunas de sus afirmaciones:- «En mi entendimiento, lo nuestro era una relación monógama aunque compartiese techo con su familia». La mujer sostuvo que ambos acordaron romper porque él no quiso divorciarse, aunque continuaron viéndose e incluso viajando juntos.- «En noviembre de 2019 le dije que si no íbamos a convivir juntos, cada cual hiciese su vida»- «Nos veíamos todas las semanas, él no podía venir a mi casa y me dijo que cogiera un piso que me gustara». Según Jessica Rodríguez, fue el propio Ábalos quien le instó a buscar un piso porque compartía con otras compañeras.-«Elegí el piso porque estaba cerca de Ferraz y de mi universidad»-«Todo lo que a mí me pasaba, el señor Ábalos lo sabía». La expareja del político afirmó que si le llegaban flores a casa, aunque las trajera Koldo García, ella sabía que eran de parte del exministro, quien le habría hecho entregas de dinero en efectivo. Noticia Relacionada estandar Si Jessica protege a Ábalos y reconoce que cobró sin trabajar de dos empresas públicas Carmen Lucas-Torres- «Hacíamos viajes todos los meses, no sé si 15 o 20» . Rodríguez reconoció haber acompañado a Ábalos a viajes oficiales y no haber pagado nada durante estos, sino que él era quien se ocupaba.- «La entrevista en Ineco fue muy sencilla, para conocerme. Tenía un grado superior, estudiaba la carrera y tenía conocimientos de Office, que era lo único que necesitaban» . En Ineco, dependiente de Transportes, trabajó dos años, entre 2019 y 2021. En Tragsa, seis meses entre marzo de 2021 y septiembre de ese año.- «En Ineco sólo utilicé el ordenador para el curso de riesgos laborales que hice cuando empecé y para fichar semanalmente, nada más»«No tenía interés en el trabajo. No me venía bien trabajar» , afirmó sobre el trabajo en Tragsatec, del Grupo Tragsa dependiente de la SEPI y cuya dirección reporta al Ministerio de Agricultura-«No recuerdo dónde firmé el contrato de Tragsatec». La expareja sentimental de Ábalos no supo ubicar las oficinas de la compañía que la contrató ni tampoco describir quién la llamó ni dónde firmó el contrato.