La declaración como testigo ante el Tribunal Supremo de Jéssica Rodríguez, la ex pareja del que fuera ministra de Transportes del Gobierno de Pedro Sánchez, José Luis Ábalos, en la que admitió que estuvo a sueldo de dos empresas públicas, Ineco y Tragsatec, pero que nunca llegó a trabajar de manera efectiva en las mismas, se ha cobrado su primera víctima, la responsable del área que la contrató para Tragsa.Caridad Martín Palacios, gerente del área de Desarrollo Rural y Política Forestal de Tragsa, precisamente en la que Jéssica fue contratada, ha sido relevada de sus responsabilidades, según ha avanzado el diario El Mundo este viernes y ABC ha podido confirmar de fuentes conocedoras de la decisión, en lo que supone el primer cese que se produce tras la polémica declaración judicial de la ex pareja de Ábalos.«El Grupo Tragsa está llevando a cabo una investigación interna al respecto con el fin de tomar las medidas oportunas y depurar posibles responsabilidades «, han explicado este viernes a ABC fuentes oficiales de la empresa pública que contrató a Jessica.Las fuentes consultadas explican que Tragsatec realiza cientos de contrataciones a lo largo del año y que la contratación de Jéssica se produjo en un proceso para la incorporación de siete administrativos, a los que se pedía una experiencia previa, algo que la ex pareja de Ábalos pudo acreditar por su paso previo por la empresa pública Ineco, donde, según confesó en el Supremo, tampoco acudió a trabajar.
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