La secretaria de Organización del PSOE de Madrid, Pilar Sánchez Acera, ha declarado este miércoles en el Tribunal Supremo que el correo reservado de la defensa del novio de Ayuso y que, a su vez, remitió al diputado autonómico Juan Lobato para que lo exhibiera en la Asamblea de Madrid, no era tal, sino una simple información que recibió de periodistas. Quien fue número dos de Óscar López en el Gabinete de Presidencia ha eximido así de responsabilidad a la Fiscalía como origen de ese envío, al menos en lo que a ella respecta, y ha negado haber recibido instrucciones de Moncloa para difundirlo . En este sentido dice haber actuado como miembro de la ejecutiva del PSM, dirigida por Juan Lobato entonces. La socialista ha declarado como testigo ante el juez que investiga al fiscal general del Estado por presunta revelación de secretos y quien pretendía seguir el rastro de ese correo electrónico que partió de Fiscalía General «destino Presidencia del Gobierno» , como apuntó el propio instructor en el auto en el que llamó a declarar a Álvaro García Ortiz. Según manifiestan fuentes jurídicas, Sánchez Acera ha dicho que el documento que ella recibió no es un correo porque no tiene destinatario ni fecha ni formato de correo electrónico y que esa información que recibió solo la compartió con Lobato, quien, ha dicho , no le hizo a partir de ese día ninguna observación sobre este episodio. Noticia Relacionada estandar Si El juez desplaza de Irlanda a Estados Unidos la comisión rogatoria para recuperar los mensajes del fiscal general Nati Villanueva Hurtado da este paso tras la gestión fallida realizada con la filial de WhatsAppAunque la acusación particular ha pedido el clonado del móvil de la socialista, el juez no lo ha acordado y ha dicho que resolverá lo que considere oportuno «más adelante». Fuentes de la acusación se muestran sorprendidas por que la testigo se acuerde con todo detalle de la mañana del 14 de marzo y, sin embargo, no recuerde qué persona concreta le envío el «correo».También cambió de móvilEn la línea del propio fiscal general y de testigos como la jefa de comunicación de la Fiscalía, Sánchez Acera ha dicho que no conserva el terminal móvil que tenía en aquel momento, que cambió de dispositivo cuando dejó de ser directora del gabinete de Óscar López (a su vez director de gabinete de Presidencia) y que le dieron otro en su nuevo puesto, por lo que no conserva nada.
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