Se cumplen cinco años de la pandemia de Covid y el exconsejero de Sanidad de Madrid es tajante: en esta Comunidad «se peleó por cada vida» con todos los recursos que había. Por eso lamenta que la izquierda solo se haya dedicado, dice, a retorcer el dolor de las víctimas. —¿Ha visto el documental ‘7.291’?—No, no lo he visto.—¿Y tiene previsto verlo?—Pues, sinceramente, no creo que vaya a verlo.—¿Por alguna razón?—El documental, conociendo a las personas que se van a entrevistar, no me ofrece ningún interés y va a ir en la línea marcada por la izquierda y la ultraizquierda durante todo este tiempo, en una estrategia para retorcer el dolor de las personas que fallecieron en la pandemia. No lo voy a ver. —No podrá valorarlo, entonces.—Tampoco es muy difícil hacerlo a priori. Ya hemos conocido las noticias falsas que se han vertido.—¿Qué la parece que se emita en RTVE?—Eso ocurre cuando una televisión pública funciona a las órdenes del Gobierno, que lo invade todo. Se dedica a atacar a la Comunidad de Madrid. —¿Qué mensaje enviaría a los familiares de las víctimas en las residencias?—Hemos peleado por cada vida, tratamos de que en todo momento, con la máxima disponibilidad y con los recursos que teníamos, de la mano de los geriatras, que eran los que sabían cuál era la solución y tenían los criterios para los traslados, se diera la mejor respuesta en las residencias. Aquí en Madrid se peleó por cada vida. Cada fallecido nos merece todo el respeto y nos parece lamentable que la izquierda esté retorciendo el dolor para conseguir objetivos políticos, que nunca tienen respuesta en unas elecciones. —¿Cree que deberían reunirse los familiares con la presidenta Ayuso?—Nosotros hemos dado siempre la posibilidad de hablar con ellos y hemos actuado con total transparencia.—La Justicia les está dando la razón a ustedes. ¿Pero hay alguna responsabilidad en la Comunidad más allá de la legal?—Nosotros hicimos todo lo que se podía hacer en aquel momento y peleamos por cada vida, en una crisis sanitaria brutal. El número de contagios creció exponencialmente, sobre todo después de la manifestación del 8 de marzo. Las sentencias refuerzan lo que decimos: siempre hubo intención de salvar las vidas. —En el documental se da un dato y se cita como fuente a la Comunidad de Madrid: fallecieron 9.470 personas que vivían en residencias, de las cuales 2.179 recibieron atención hospitalaria y 7.291 no tuvieron derivación a hospitales. ¿Son correctos estos datos?—No, no son correctos. Los datos de cada fallecido necesitan un rigor extremo y pasan varios filtros. Esos datos los dio la Consejería de Política Social, con unos cuadros de Excel que se obtenían con llamadas a las residencias, sin ningún tipo de conocimiento de lo que ocurría. El dato real, que lo da el INE, son 4.143 víctimas en las residencias desde enero a julio de 2020. Es la cifra exacta. Es la auténtica realidad. Los otros datos los tenía el consejero que se borró de la pandemia [de Ciudadanos]. —¿Qué protocolo hubo que impidió que se derivaran muchos enfermos a los hospitales desde las residencias?—Los protocolos de derivación los hacían los geriatras de enlace. Son criterios clínicos de traslado, lo que se hizo en todo momento. Se ven los perfiles de los pacientes que pueden ser derivados. —El consejero Reyero avisó de que lo que estaba ocurriendo era ilegal. —Es el consejero que se borró en la pandemia y lo único que hizo fue protegerse durante todo el tiempo. No me hizo ni una sola llamada para comentar la situación de las residencias. No es el más indicado para decir lo que es legal o no, y en cualquier caso lo están decidiendo los juzgados. —¿Qué se hizo mal y qué cambiaría ahora?—Cambiaría, por ejemplo, el haber actuado solo, sin que el Gobierno de España marcara las pautas al inicio. Madrid se adelantó y España se movió porque se movió Madrid.—¿Qué se ha cambiado en los protocolos desde entonces?—Los criterios de derivación siguen siendo los mismos. Se hacen según los geriatras de enlace, que son los que coordinan la situación en las residencias. —¿Entonces si hubiera una nueva pandemia se volvería a actuar igual en las residencias?—No es tan simplista. Hay que valorar muchas cuestiones. Pero los criterios de traslado se aplican permanentemente, haya o no pandemia. —¿Cree que los geriatras actuarían de la misma manera?—Ellos son los expertos y los que tienen que decidir. Y saben lo que habría que hacer en cada momento. —¿Ve necesaria una investigación más profunda sobre lo que ocurrió en las residencias?—Está en los juzgados. Ya se han archivado sesenta denuncias.—¿Apoyaría una investigación a nivel nacional?—Por supuesto, porque parece que solo hubo fallecidos en Madrid. Y tengo que recordar que en tasa de mortalidad en las residencias, Madrid es la quinta comunidad. Por delante están Cataluña, La Rioja, Aragón y Castilla-La Mancha.—La izquierda está utilizando este asunto como arma política para desgastar al PP. ¿Ve un desgaste de la presidenta Ayuso?—Esto se lleva haciendo desde 2020. Ha habido dos elecciones, el PP venía de 30 diputados y ahora tiene 70. Ellos siguen con esa estrategia, que es retorcer el dolor, y el impacto electoral ha sido en todo caso para reforzar a la presidenta.—¿Fue un error reprochar a la oposición que esté siempre ‘con las mismas mierdas’, como dijo la presidenta sobre su estrategia política?—Vino a decir que la izquierda siempre hace lo mismo, que es retorcer el dolor. Es la izquierda más perdedora de toda Europa, lleva 30 años en la oposición y utiliza cualquier arma, pero retorcer el dolor no le ha servido. —¿Cuál fue el principal error que se cometió en los meses más duros de la pandemia?—El principal error fue celebrar la manifestación del 8 de Marzo. Eso tuvo un efecto multiplicador sobre los contagios, que luego lo vimos después. El Gobierno hizo todas las maniobras para tratar de celebrarla.
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