Impracticable quedó el ruedo al término de la novillada del jueves después de que en las dos últimas faenas cayera el diluvio universal. Un nombre salió fortalecido, el de Íker Fernández ‘El Mene’, que se marchó por la puerta grande tras ofrecer una dimensión fantástica, decir y hacer el toreo. Los jóvenes se hacían fotos con el maño este viernes en el tendido, donde la gente aguantó hasta las seis para ver si, después de marear la perdiz y de que la autoridad no actuase con firmeza desde el principio, se celebraba la primera corrida de la Feria de Fallas . Darla hubiese sido un auténtico despropósito, pero también lo fue hacer que el público permaneciera una hora en el asiento mojado, con un frío helador, hasta anunciar el único camino posible para la sensatez: la suspensión.No había cesado la lluvia en toda la noche y durante toda la jornada de este viernes no paró hasta quince minutos antes del festejo, que fue hasta ‘mala suerte’ para mantener a los tendidos expectantes con el se celebrará o no. Encharcado estaba el redondel, convertido en una piscina donde la lidia se antojaba imposible. A cuentagotas comenzaron a entrar los espectadores, pero en el último cuarto de hora -sin llovizna- se ocupó un tercio de los tendidos. Un grupo de niños de apenas diez años llenaba el palco que lindaba con el de prensa. Su sonrisa contrastaba con el gesto serio de los toreros mientras revisaban el ruedo. Valencia es un puerto esencial y el deseo era torear, más en unos que en otros, pero la realidad imperaba por aquel barrizal y, al parecer, la escasez de arena…Noticia Relacionada EXCLUSIVA estandar Si OneToro televisará la Feria de Fallas, con el doblete de Roca Rey Rosario Pérez Las cámaras del operador privado estarán presentes en el serial valenciano, el primero de primera categoría de la temporada, del 13 al 16 de marzoEstaba cantado que era de suspensión, pero a las cinco apareció un tractor con un rastrillo para mejorar el ruedo, aunque más bien empeoraba. Tras veinte minutos buscando achicar el agua, salió con tres espuertas de arena, ¡espuertas o ‘aguaeras’!, y una carretilla de mano, ¡una carretilla! para echar arena sobre lo mojado y arreglar el desaguisado por la climatología. Un parche hicieron los operarios en terrenos de capotes. ¿Y el resto de la plaza? Como si fuesen a amarrar a los toros del Parralejo en ese territorio. En fin…Venía Rafael Molina con la ilusión de emocionar con la bravura de los toros del Parralejo, que se sortearon por la mañana a la hora establecida: Laminado, Candelario, Bético, Exquisito, Tomillo y Gabacho eran los nombres de los ejemplares, algunos de mucha seriedad.Sin lidiar se quedaron cuando, a las seis de la tarde, se impuso por fin la cordura y se anunció la suspensión cuando el público ya había comenzado a mostrar su hartazgo con palmas de tango y gritos de «¡fuera, fuera!». Tan solo los niños del palco, del colegio San Juan Evangelista, aligeraban el bochorno con sus risas, sus comentarios espontáneos y sus voces de «¡Domingo, Domingo!» de sonoros decibelios para que el comentarista de OneToro los saludara: «¡Queremos ser famosos, queremos ser famosos!». Uno me preguntó que por qué escribía. Le expliqué que era la cronista taurina de ABC y les prometí que el nombre de su cole aparecería en estas líneas del periódico. Y más cuando uno tocó mi corazón blanco con sus cánticos de «¡Hala Madrid!». Los alumnos de Massamagrell se quedaron con las ganas de ver toros, pero se lo pasaron pipa. Fueron los únicos. Cuando los toreros se marchaban por el túnel de cuadrillas y la megafonía anunciaba la suspensión, la bronca retumbó en la estación de tren y comenzó la lluvia… de almohadillas. No se puede tener a los espectadores una hora cuando se sabe que el ruedo está tan dañado. Recordé entonces una conversación con el maestro Luis Francisco Esplá en la que me hablaba de la «fidelidad» del público taurino y de los «latigazos» que aguanta. «Lo que más me aterra es que es el único negocio donde el consumidor, en este caso el espectador, no tiene nada que decir; se abusa de él», decía. «Salgo cabreado», «cabreadísimo», «qué cabreo» eran las expresiones más repetidas por la calle de Játiva. Feria de Fallas Plaza de toros de Valencia. Viernes, 14 de marzo de 2025. Primera corrida. Un tercio de entrada en jornada de frío, lluvia y el ruedo impracticable. Toros de la ganadería del Parralejo. Miguel Ángel Perera, de menta y oro. Paco Ureña, de verde botella y oro. Fernando Adrián, de blanco y plata.Mosqueo general, pero mañana todos llenarán los tendidos a la espera de Roca, Rey de la taquilla. Será retransmitida por las cámaras de OneToro, presentes este viernes. Eduardo Dávila Miura lamentaba lo ocurrido mientras bajábamos las escaleras: en su opinión, y en la de la mayoría, «incomprensible» que a las cinco no se anunciara la suspensión. Cincuenta y cinco mil euros dejaba la tele, a la que se le ha ofrecido la posibilidad de retransmitir otra corrida la semana próxima en Valencia. La del 19 podría ser…Y esta fue la historia de la suspensión de una ‘Tarde de cañas y barro’ en vísperas de la llegada del protagonista de ‘Tardes de soledad’.

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