Corría el año 1984 y un joven Jorge Mario Bergoglio , de 46 años y provincial de la Compañía de Jesús en Argentina, viajó a Mallorca para visitar los restos de San Alonso, el santo español fallecido en Palma a quien el argentino tanta devoción profesaba.«Sentía una especial veneración por San Alonso Rodríguez y quería conocer de primera mano más sobre él», recuerdan los Jesuitas de Mallorca sobre esta visita que dejó una «huella imborrable» en la vida espiritual del Papa Francisco, quien nunca visitó España como pontífice .El santo Alonso Rodríguez fue portero del colegio Montesión de Palma durante 43 años y murió el 31 de octubre de 1617, tras entregarse por completo a la plegaria, la obediencia absoluta y los asuntos espirituales. Fue enterrado en la iglesia de Montesión de Mallorca y es considerado símbolo de la espiritualidad de los Hermanos Coadjutores jesuitas. La capilla es la joya de la barroca iglesia de Montesión, construida un siglo después de la muerte. Y la inscripción en latín sobre su sepulcro reza: «Se concedió por el Sumo Pontífice León XII que los huesos del Beato Alfonso Rodríguez fueran santamente conservados aquí . Día 10 de las Kalendas de noviembre de 1825».Aprovechando el viaje a Roma a la 33ª Congregación General de la Compañía de Jesús, Jorge Mario Bergoglio se desplazó a Mallorca en los años ochenta para visitar esta capilla del santo jesuita. Quería conocerla de primera mano y llevarse una imagen que inspiraría la capilla que se estaba construyendo en el barrio de San Miguel de Buenos Aires.Noticias relacionadas estandar No Diplomáticos y genios de las letras Los tres papas españoles en la historia que hicieron grande a Roma Manuel P. Villatoro estandar Si El sábado, a las 10 Los detalles de un funeral «familiar»: del velo de seda a las 12 monedas en el ataúd Javier Martínez-Brocal | Corresponsal en El Vaticano«Fueron unos días en los que disfrutó de la acogida de sus hermanos jesuitas en Mallorca y pudo recoger elementos que después inspiraron el citado templo», rememoran los Jesuitas de Mallorca con motivo de la muerte del Papa Francisco.Tras su visita a Mallorca, Bergoglio envió una carta de agradecimiento por el tiempo compartido en la isla, donde informaba de las novedades sobre el avance de la nueva iglesia, acompañada de imágenes sobre el progreso de las obras en su tierra argentina.La carta: «Adjunto calcamonías para fomentar la devoción»La misiva de Bergoglio, enviada el 7 de junio de 1984 al rector del Colegio Nuestra Señora de Montesión daba las gracias por la acogida recibida en su visita: «Queridos amigos. Pax Christi. Aprovecho que, en medio de esta huelga de correos, un padre italiano viaja a Milán, para enviarles un saludo, juntamente con las adjuntas calcomanías que acabamos de hacer para seguir fomentando la devoción por San Alonso».«La Iglesia anda bien. Ya hemos comenzado a cerrarla, lo cual supone también que se comienza a poner el mosaico y a hacer el altar. Todo muy bueno, por cierto. Recuerdo con afecto mis horas pasadas allí. Y con frecuencia me encuentro rezando por ustedes . Afectísimo en el Señor nuestro y Su Santísima Madre», concluía la carta con su firma al pie, Jorge Mario Bergoglio, S. J. MÁS INFORMACIÓN noticia No El Cónclave: el minucioso mecanismo para elegir al Santo Padre noticia Si La generación que creció en la fe con el Pontífice noticia Si Los vecinos de su barrio natal recuerdan la «humildad y la alegría» del ciudadano ilustre de FloresFue un viaje que el Papa Francisco nunca olvidó y, a pesar de los años, volvió a mandar gestos de que aún recordaba su visita. En 2024 el obispo de Mallorca recibió una sentida carta de felicitación con motivo de la celebración, el 31 de octubre, de la Fiesta de San Alonso Rodríguez; festividad que coincidió con la reapertura al público del museo del Santo, ubicado en el Colegio de Montesión, así como con la reanudación del culto en la capilla donde se encuentra su sepulcro.

Leave a Reply