El Tottenham Hotspur se proclamó ayer campeón de la Europa League en la gran final de San Mamés después de vencer 1-0 al Manchester United. Rompe con poco ‘jogo bonito’ y mucho ‘fútbol inglés’, una racha de 41 años sin alcanzar títulos europeos y un billete directo para la Champions del año que viene. Resuelve así, a lo grande y a costa del United, una mala temporada en Premier, donde ambos han estado coqueteando con el descenso, habiéndolo fiado todo al encuentro celebrado este miércoles. El United ya había pisado el césped de la Catedral esta temporada, cuando arrasaron al Athletic en el partido de ida de las semifinales. Nada que ver con lo de ayer. Partido tosco, sin demasiado fútbol ni un dominador claro. Ruben Amorim dejaba fuera del once titular a Garnacho, de los más desequilibrantes, y el Tottenham estaba cómodo guardando los muebles. En los exteriores de San Mamés ardían varios contenedores y se producían choques entre aficionados.El amplio despliegue de seguridad diseñado por el Gobierno vasco, con numerosos efectivos de la Ertzaintza y la Policía Local, logró evitar trifulcas en la llegada de las aficiones al estadio. No entre ingleses que habían llegado al País Vasco sin entrada para el partido (alrededor de 55.000 en total, según el Ayuntamiento de Bilbao) y que estuvieron bebiendo desde primera hora de la mañana en la zona céntrica de la capital vizcaína. A la espera del parte oficial, hubo detenciones, destrozos en el mobiliario urbano y heridos, tras varias peleas aisladas, que ya se habían dado en días previos en otras ciudades como San Sebastián o Santander, a donde también llegaron hinchas ingleses. En Bilbao, transformada durante dos días en una ciudad británica (o casi), no todos recibieron bien a los ‘spurs’. En algunos puntos de la ciudad, donde se exhiben decenas de banderas de Palestina puesto (esta causa está ampliamente extendida en sectores de la izquierda aberzale), pudieron verse banderas señalando los lazos judíos que tiene el club. «Zionist not welcome», podía leerse en una pancarta que también se distribuyó por redes sociales en contra de la afición del Tottenham. Noticia Relacionada Fútbol estandar Si El Athletic se queda sin milagro ni final en San Mamés Gerard Bono Los ‘leones’ también salen goleados por el United en Old Trafford pese a soñar con la remontada tras adelantarse en el primer tiempoDe vuelta al fútbol, hubo que esperar hasta el final de la primera parte para que empezara a decantarse la final. En la línea de lo visto sobre el verde, en una jugada extraña después de un centro lateral y varios rebotes, el Tottenham logró adelantarse con un gol que la UEFA concedió a Brennan Johnson. Ante la necesidad, el Manchester se volcó y la segunda parte se convirtió en un guion de acoso y derribo contra la portería de Vicario, con la velocidad de Garnacho y el poderío aéreo de Maguire como principales armas ofensivas. Pudo más la resistencia de los ‘spurs’, quienes, como casi cualquiera que pone un pie en este estadio, no olvidarán San Mamés.

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