Las redes sociales y los videojuegos en línea se han convertido, desde hace años, en terreno abonado para los pederastas más peligrosos. Uno de ellos se enfrenta, desde la semana próxima, a una pena de 325 años de cárcel en un juicio que se inicia en la Audiencia Provincial de Madrid, según el escrito de calificaciones provisionales, al que ha tenido acceso ABC. El monstruo de Fornite acumuló miles de imágenes de menores de 13 años a través de esta plataforma.El reo, A. M. V., lleva en la cárcel desde julio de 2023, cuando fue arrestado. Se le acusa de contactar con más de una veintena de menores a través del juego Fortnite: hacía capturas de pantalla a través de una videollamada mientras le mostraban sus genitales. El representante del Ministerio Público le imputa un delito de agresión sexual (11 años), siete delitos abusos sexuales continuados (5 años por cada uno), siete delitos de abusos sexuales (4 años por cada uno), 25 delitos de pornografía infantil (9 años cada uno) y 13 delitos del artículo 183 del Código Penal (contactar con un menor de 16 años mediante internet, teléfono o cualquier otra tecnología para cometer un delito de agresión o abuso sexual (2 años cada uno). Según el escrito de acusación, A. M. V. durante el año 2021 fue usuario del juego online Fortnite. En ese periodo de tiempo estuvo contactando con menores de 13 años, con los que jugó y se ganó su confianza comprándoles artículos para el juego, o bien, dándoles «pavos», que es la moneda del juego, que se usaba para comprar cosas como pases de batallas, trajes, picos. Noticia Relacionada estandar Si Un pederasta, a menores que jugaban a ‘Fortnite’: «Te consigo un fusil si me enseñas tus partes» Cruz Morcillo Detenidos dos presuntos pederastas, uno de ellos profesor, que contactaban con niños de 8 años a través del popular juego ForniteUna vez que los menores lo consideraron su amigo, el procesado, teniendo conocimiento de que éstos eran menores de 13 años, contactó con ellos a través de videollamadas, y por el sistema de audio del juego Fortnite, pidiéndoles que les mostrara y exhibiera sus genitales, y una vez que los menores vencieron su resistencia, al haberse ganado el procesado su amistad, accedieron a su petición.El procesado procedió a capturar las referidas imágenes de cada uno de los menores, a las que luego asignó un nombre, utilizando para ello su teléfono móvil o bien su ordenador, y luego las almaceno en una carpeta a la que denomino «angelitos». Posteriormente, subió este archivo a una cuenta del servidor MEGA.NZ.Mediante auto de fecha 24 de septiembre de 2021, dictado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción, se acordó la entrada y registro en el domicilio donde residía el acusado,en Málaga. A raíz del examen del material incautado, se procedió a analizar una cuenta de Gmail que el procesado tenía en el servidor Mega, donde se hallaron en la carpeta «angelitos» archivos con imágenes de menores de 13 años, de naturaleza sexual, que habían sido obtenidas por el procesado, durante el años 2021. Lo hizo aprovechándose de esa relación de confianza y la corta edad de los menores, mediante fotografías o capturas de videoconferencias, cuando éste se ponía en contacto con los menores a través de las TIC, una vez que los menores se desnudaban y exhibían poses de naturaleza sexual, después de haber superado y vencido sus reticencias, y haber entablado una relación de amistad con el procesado. En total aparecen 25 críos, la mitad de ellos no identificados.
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