El magistrado del Tribunal Constitucional Enrique Arnaldo ha enviado una carta al presidente del Tribunal de Garantías, Cándido Conde-Pumpido, en la que le reprocha las prisas con las que quiere debatir y votar sobre la constitucionalidad de la ley de amnistía. Arnaldo considera en su escrito que esta es una de las decisiones más importantes que se han tomado en los más de 45 años del Tribunal y, como tal, debería abordarse de una manera reposada: «No logro comprender el porqué del apresuramiento en la deliberación y votación de la ponencia del recurso sobre la Ley Orgánica 1/2024. Estarás de acuerdo conmigo en que la resolución que haya de dictarse en relación con la misma es una de las más trascendentes en los más de 45 años de vida de este Tribunal. En los más relevantes asuntos que el Tribunal ha resuelto en esos años -y cito sin ánimo exhaustivo, el Real decreto-ley de expropiación de Rumasa, el Estatuto de Autonomía de Cataluña, la aplicación del art. 155 CE el Real decreto por el que se declaró el estado de alarma-, en todos ellos se ha evitado la aceleración porque el sosiego, la deliberación reposada y pausada es un requerimiento necesario. Así nos lo enseñó y lo dejó por escrito, Tomás y Valiente, que fuera presidente de este Tribunal Constitucional entre 1986 y 1992 y que fuera asesinado por la organización terrorista ETA en 1996«, afirma en la carta consultada por ABC. El miembro del bloque conservador del órgano de garantías ya emitió la semana pasada un voto particular contra la decisión de la mayoría progresista de no aceptar el recurso de Partido Popular y Senado para que el asunto se aborde más tarde, una vez el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) se haya pronunciado sobre la amnistía en su respuesta a la cuestión prejudicial del Tribunal de Cuentas. Noticia Relacionada estandar Si Europa abre otra vía para frenar el plácet de Pumpido a la amnistía Carmen Lucas-Torres La Comisón advierte en sus alegaciones al TJUE de que el perdón va contra el Estado de DerechoEl magistrado reprocha a Conde-Pumpido que con su decisión de no retrasar la deliberación, que comenzará el próximo lunes, insta al Pleno a decidir antes de que acabe la semana. «Cuando, como respuesta a mi carta, decidiste anticipar un día, al lunes día 23 de junio, el comienzo del Pleno, para el que has reservado todos los días de esa semana última del mes de junio, se traslada un mensaje a los miembros de este Tribunal y a la sociedad española. Tal mensaje es el siguiente: antes de que esa semana termine, la sentencia sobre la ley de amnistía ha de estar votada. La semana que comienza el 23 de junio se configura como una suerte de cónclave que necesariamente ha de concluir con la sentencia», lamenta en la segunda carta que dirige a Pumpido.
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