Pelayo ha aparecido en ‘ TardeAR ‘ (Telecinco) para comentar sobre su participación en ‘Supervivientes’ (Telecinco) y para explicar sobre el choque que tuvo el pasado viernes con Carmen Alcayde , en vivo y en directo, en otro programa de la casa, ‘¡De Viernes!’. Si bien ha dado respuesta a numerosas cuestiones que le han planteado Frank Blanco y Verónica Dulanto, lo que más ha llamado la atención es la referencia que ha dado sobre Montoya , su enemigo íntimo. El influencer ha sorprendido al hacer referencia a algo que ya adelantó el otro día, que en un momento determinado del concurso creyó que Pelayo podría «ser gay y sentir algo por mi». Al escuchar esto, los presentadores le han preguntado en qué se basan para apuntar esto y él ha dado respuesta a esas dudas. Varios puntos a tener en cuenta, según el madrileño, para llegar a esa conclusión: «Él me confesó que soñó conmigo y me dijo que era la primera vez que tenía un sueño con alguien así». «¿Pero algo sexual o íntimo?», le han preguntado los colaboradores, a lo que Pelayo ha respondido que no.Otros indicios para él han sido que «me dijeron que me había elegido como enemigo, de hecho me lo dijo Carmen Alcayde. Cogió fijación hacia mi y, del amor al odio, hay un paso. Además, es como alguien obsesionado conmigo». Ha sumado experiencias previas, según Pelayo, con personas con las que ha mantenido relaciones y que después le han tomado manía. Frank Blanco le ha apuntado que él se lo puso «en bandeja, esa fijación y obsesión , porque tú eras algo clasista y, admítelo, considerabas que él era un concursante de segunda». Respecto a su enfrentamiento con Carmen Alcayde , este también ha dado respuesta a el hecho al que se refería al afirmar que iba a desenmascararla para que vieran quién era la verdadera Carmen. «Pues es que me saca de quicio, porque ella te dice una cosa fuera de cámaras y otra después, no se. Todos tenemos un límite y yo lo sobrepase por ella el viernes. Me habría gustado controlarme más pero no pude», ha dicho en relación al programa ‘¡De Viernes!’, donde ambos subieron mucho el tono de voz. Los tertulianos le han preguntado si es algo irreconciliable. Él no ha querido responder a eso pero ha vuelto a incidir en eso de «me saca de quicio y no lo puedo evitar, porque es diferente cuando están las cámaras delante y cuando nadie la está grabando». Él ha presumido de haber sido transparente y «auténtico, y a la gente le ha gustado mi concurso, me lo han demostrado al salir».

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