Los Mossos y la Policía Nacional resuelven el crimen de Juan Manuel Leiva González, 20 años después de su desaparición

Home People Los Mossos y la Policía Nacional resuelven el crimen de Juan Manuel Leiva González, 20 años después de su desaparición
Los Mossos y la Policía Nacional resuelven el crimen de Juan Manuel Leiva González, 20 años después de su desaparición

Juan Manuel Leiva González despareció en Reus (Tarragona) en 2004. Fue su familia la que formalizó la denuncia en una comisaría de la Policía Nacional el 6 de septiembre, tras tres días sin tener noticias de él. Se había marchado de casa sin dar explicaciones. Su coche apareció en las proximidades de la estación de ferrocarriles de Tarragona. Durante aquellos primeros semanas, los móviles de Juan Manuel, que no se llevó, recibieron varias llamadas de supuestos testigos que aseguraban que se encontraba en Francia. Alguien intentaba despistar a los investigadores simulando una huida voluntaria . Ahora, casi 20 años después y a tres meses de prescribir el caso, los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional han detenido a una mujer, acusada de matarlo . Era la expareja de la víctima quien, junto a su nuevo compañero sentimental -ahora fallecido-, lo engañaron para desplazarse hasta una masía aislada y matarlo con un arma blanca, para apropiarse así de la empresa de extintores que regentaba. Resolver el caso no ha sido tarea fácil. Fue en 2021 cuando se localizó el cadáver de un hombre , enterrado en una finca rústica de Riudecols. Estaba cubierto con una manta y una lona, y atado con cuerdas. La Policía catalana abrió entonces una investigación, tras determinar la autopsia que se trataba de una muerte violenta. Pero el análisis forense no permitió entonces identificar a la víctima. Tampoco se encontró ninguna coincidencia de perfil genético, ya que no había muestras de ADN de sus allegados en las bases de datos del Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES). No fue hasta unos años después del hallazgo, cuando las pesquisas dieron un giro : el 20 de febrero de 2024, la hermana de Juan Manuel se presentó en una comisaría de los Mossos para explicar que un conocido había desvelado a otro familiar quien lo habría matado . Tras su declaración, se exhumaron los restos hallados en la finca rústica y, obtenido el perfil genético de la hija del desaparecido, se pudo comparar con los restos óseos no identificados: su padre era la víctima. Noticia Relacionada reportaje No Batas blancas contra el crimen organizado Elena BurésCon la declaración y la conciencia genética se reactivó así el caso, y se constituyó un equipo conjunto de investigación entre el Cuerpo catalán y la Policía Nacional. Había una nueva línea de investigación: la expareja de Juan Manuel y su nuevo compañero sentimental eran los sospechosos . De hecho, los restos óseos se localizaron sólo a 700 metros de donde ambos residían. Los agentes detuvieron así a la mujer, acusada del crimen. No así al otro sospechoso, que ya falleció -por causas naturales- en 2022. El análisis de los restos permitió certificar que habían asestado a Juan Manuel al menos una puñalada en el húmero y otras dos en las costillas. Lesiones coincidentes con las localizados en su ropa, determinando así la causa de la muerte e identificando a sus asesinos, a tres meses de prescribir el caso . Su expareja ya ha ingresado en prisión provisional, a la espera de juicio .

Leave a Reply

Your email address will not be published.